El conseller de Territori i Sostenibilitat, el egarense Josep Rull, anunció ayer que las restricciones de circulación a los vehículos muy contaminantes en días de contaminación extrema se ampliarán a varios municipios vallesanos como Granollers, Sabadell y Terrassa.
Lo aseguraba ayer en una entrevista concedida a TV3. Después de que el Consell de l’Area Metropolitana (AMB) diera luz verde el martes a esta medida en las rondas de Barcelona y en su anillo interior, Rull anunció ayer la intención de la Generalitat de ampliar la restricción a aquellos municipios donde también se registran elevados niveles de contaminación a lo largo del año.
Rull planteó que en episodios de gran contaminación, que se registran entre cuatro y cinco veces al año, "pueden afectar a una zona concreta mucho más amplia", que el Àrea metropolitana de Barcelona", de tal manera que cuando se den esas circunstancias las restricciones se aplicarán también en el entorno metropolitano.
"De manera separada -argumenta el conseller Rull- las medidas del Ayuntamiento de Barcelona o las adopatadas ayer (por el martes) por el Àrea Metropolitana son insuficientes. Pero en cambio cuando las unimos todas, y esta es la voluntad que tenemos, cuando vamos juntos, es posible de desarrollar la medida. Porque cuando se produce una punta de contaminación extrema, puede afectar a una zona muy concreta, pero también a una mucho más amplia".
Territori reunirá el próximo día 24 de febrero a representantes de 40 ayuntamientos, consejos comarcales y la Diputació de Barcelona en un encuentro "de alcance político de primerísimo nivel". En la cumbre se anunciarán las medidas concretas que se aplicarán en cada zona y el calendario de despliegue.
En una primera fase las restricciones se ampliarán al Vallès y en una segunda al Maresme y al Alt Penedès. Miles de vehículos recorren cada día en trayecto entre estas comarcas y la metrópoli barcelonesa.
El conseller Rull plantea que, para que la medida funcione, hay que plantear alternativas, y toma como ejemplo las restricciones aplicadas a principios de diciembre en la capital de España. "No puede pasarnos como en Madrid -dijo-, donde se tomó una decisión que generó un cierto grado de colapso".
En cuatro o cinco años, apuntó el conseller, los coches eléctricos mejorarán su autonomía y eso permitirá un relevo acelerado del parque móvil que permitirá retirar los coches convencionales y sustituirlos por modelos no contaminantes.
Terrasa, dispuesta a colaborar
El Ayuntamiento de Terrassa acudirá el próximo 24 de febrero a la cumbre de la movilidad con la voluntad de participar activamente en la iniciativa. Ayer, el teniente de alcalde de Territorio y Sostenibilidad anunció que el ejecutivo está "dispuesto a hablar. Terrassa estará presenta de manera activa".
Armengol recordó que la ciudad lleva años aplicando medidas destinadas a reducir los niveles de concentración de dióxido de carbono en las zonas más sensibles, en aplicación del Plan de Movilidad y del Plan de Millora de la Qualitat de l’Aire. Si ahora se da el paso de restringir la circulación de los vehículos más contaminantes, apunta, la medida deberá ser "homogénea".
"La restricción de la entrada o salida de vehículos a la ciudad tiene sentido si todos vamos a la una. No tiene lógica que la medida se aplique en una sola ciudad. Es decir, ¿no dejaremos entrar a los vallesanos a Barcelona porque contaminan pero sí dejaremos entrar a los barceloneses al Vallès? Las medidas deben ser recíprocas".
En Terrassa los mayores niveles de contaminación se registran en el tramo sur de la ciudad, en las zonas más próximas al eje de las autopistas C-58, C-16 y C-55, y en las calles de sección estrecha y elevada concentración de tráfico, como Sant Antoni, Topete o parte del circuito que rodea el centro peatonal.
En las entradas y salidas a la ciudad, apuntan desde el área municipal de Territorio y Sostenibilidad, la inciativa corresponderá a la Generalitat de Catalunya, no al Ayuntamiento de Terrassa, ya que las autopistas son de titularidad autonómica.
