"La Mola está nevada". Seguro que miles de terrassenses y de otros pagos de la comarca pronunciaron la breve frase ayer por la mañana. Si la nieve no ha cuajado en el casco urbano de Terrassa, por menguada y tenue, se gira la vista y se mira a la cumbre de la montaña de Sant Llorenç. Sí, la corona nívea se había posado en la cima durante la noche. En algunos puntos de Terrassa cayeron copos; pocos, insuficientes para alfombrar calles.
Hubo unos cuantos valientes que, bien pertrechados de abrigo, hollaron los parajes blancos y crujientes. Las temperaturas, según el Meteocat, subirán hoy en Terrassa. La máxima se situará en los once grados (fue ayer de nueve) y la mínima, en cuatro (ayer, de un grado). La probabilidad de precipitaciones será muy alta.
