El alcalde de Terrassa firmó ayer el decreto que activa el Pla Bàsic d’Emergència Municipal en fase de alerta, ante la llegada de la ola de frío siberiano que desplomó ayer los termómetros y que se espera que hoy sitúe las mínimas por debajo de los -5ºC en la ciudad.
El plan comporta mantener informada permanentemente a la población de la situación de frío, comunicando las medidas de auto protección necesarias y realizando un seguimiento especial de la población en situación muy vulnerable (personas mayores, niños, con movilidad reducida y con problemas de salud).
También prevé la atención especial a los ciudadanos en situación de vulnerabilidad social y la activación de los centros de acogida de urgencia.
Desde ayer, está convocado de manera preventiva el Comité de Emergencia local y los servicios municipales están en alerta ante la posibilidad de que se les requiera. El comité sigue al minuto la información meteorológica, las incidencias y los avisos que emita el Centre de Coordinació Operativa de Catalunya (CECAT).
Dos pernoctaciones
El dispositivo de visita a las personas que habitan en infraviviendas o se encuentran en situación vulnerable ya se ha activado. Trabajan conjuntamente Servicios Sociales, Policía Municipal y Creu Roja.
Profesionales de estos dos servicios iniciaron anoche las rutas de supervisión, ofreciendo alojamiento de emergencia y, en el caso de que rechacen el traslado, entregando mantas y comida caliente.
La noche del lunes al martes se registraron las primeras dos pernoctaciones de emergencia por el frío en el alojamiento de urgencia y acogida L’Andana, que gestiona Creu Roja. Anoche se esperaba que la cifra aumentara, pero el dato no se conocerá hasta hoy.
El servicio ofrece de manera habitual 34 plazas y atiende a personas derivadas de los servicios sociales, en horario de 17h a 9 horas todos los días del año. El equipamiento tiene capacidad para seis camas más y, si fuera necesario, el Plan de Emergencia contempla el alojamiento en equipamientos cívicos. La red municipal ha mantenido esta última noche activada la calefacción en estas dependencias por si fuera necesario alojar en ellas a un número de personas mayor, tarea que realizaría Creu Roja.
En previsión de que el descenso acusado de las temperaturas pudiera provocar heladas en la red viaria, el servicio de Gestió de l’Espai Públic del Ayuntamiento cuenta con una reserva central de 50 toneladas de sal y 16 puntos de distribución con contenedores o sacos por toda la ciudad, especialmente en las urbanizaciones.
El episodio de frío siberiano no prevé precipitaciones, de manera que el riesgo de formación de hielo es bajo. A pesar de ello, cuatro vehículos (dos automáticos y dos de distribución manual) están preparados para intervenir si fuera necesario.
El temporal que afecta desde ayer Catalunya dejó estampas de nieve en el Pirineo, termómetros que llegaron a los 20 bajo cero y fuertes rachas de viento en todo el territorio. También en Terrassa, donde después de una mañana fría pero soleada el mercurio se desplomó, dando paso a una de las noches más gélidas en muchos años. Hoy se espera que los termómetros toquen fondo, para remontar lentamente los próximos días.