Estrés, ansiedad, depresión… Los trastornos psicológicos han aumentado y aparecen cada vez más en edades tempranas, en buena medida por caer en adicciones como el alcohol. Lo explica Miguel Ángel Santed, doctor en Psicología y reconocido docente e investigador de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned). Desde el año pasado también ejerce como presidente de la Conferencia de Decanos de Psicología de las Universidades Españolas. Santed expresa que lo que más le sorprende de la mente humana es su ingenio para generar un sufrimiento que, a veces, no se corresponde con la realidad, y reivindica desde su posición una mayor intervención del psicólogo clínico en el ámbito sanitario.
¿La crisis ha incrementado el estrés y la ansiedad?
Cada etapa histórica tiene unas particularidades psicopatológicas diferentes. Sin duda, un signo de los tiempos actuales en nuestra sociedad occidental es el estrés y la ansiedad, además de otras, como la depresión. Y sí, efectivamente, las consultas atienden a muchas personas afectadas por estos trastornos. La crisis ha agudizado en alguna medida más algún tipo de patologías. Entonces, si bien por un lado, la gente ha tenido más dificultades en disponer de un dinero para ir al psicólogo, por otro lado, el estrés, la ansiedad, y la depresión han sido más acuciantes para grandes masas de población.
Dicen que España es el país que consume más ansiolíticos. ¿Es así?
Sí. Y a partir de esa afirmación me voy a permitir reivindicar algo que reivindicamos desde la academia, los colegios profesionales y también los estudiantes y es que el psicólogo sanitario forme parte de la atención primaria. Hay estudios que indican que si el psicólogo estuviera más presente en la atención primaria, la salud de la población estaría mejor cuidada y reduciría el gasto del sistema de salud pública en medicamentos.
¿Eso quiere decir que el médico de cabecera debería derivar el paciente hacia al psicólogo antes de extender la receta de pastillas?
La verdad es que contamos con un profesional excepcional que es el médico de familia pero si menoscabo de esta afirmación, de la que estoy plenamente convencido, no es el médico de familia el que debe atender en primera instancia a los pacientes que demandan algún tipo de asistencia psicológica sino que debería ser el psicólogo sanitario en colaboración con el médico de familia Porque el médico estaría capacitado para recetar la medicación pero el psicólogo debería asistir psicológicamente al paciente. Debería existir una colaboración entre ambos.
¿Hay perfiles de personas más vulnerables a padecer problemas psicológicos?
En lo que se refiere a trastornos de ansiedad son las mujeres. O sea sí que hay una distribución de patologías por sexo. Las adicciones, por ejemplo, son más prevalentes en hombres y los trastornos de ansiedad o los problemas de sueño en las mujeres…. Luego hay otros factores que influyen como la genética y el clima. Hay estudios que relacionan condiciones y causas.
¿La depresión avanza en edades tempranas?
La verdad es que, desgraciadamente, hay muchas patologías que aparecen cada vez más tempranas. Estrés, ansiedad, depresión, trastornos alimentarios y también las adicciones. Cada vez de manera más temprana, los jóvenes se alcoholizan los fines de semana, se meten en adicciones de distinto tipo…Fue tremeda la noticia de esta niña de 12 años de Madrid que falleció por un coma etílico en noviembre pasado.
¿Y también las tecnológicas?
Internet… Un día vi en un canal nacional una encuesta en la calle que me pareció de enorme interés y significativa. Preguntaban a transeúntes, más o menos jóvenes entorno a los 20 y tantos y 30 y tantos años, con que persona se irían en el caso de estar recluidos en un búnker por un tiempo. Pues la gente solía decir que elegiría a su madre o a su pareja para estar unas semanas. Después, les preguntaban, que si tuvieran que elegir entre esta persona y el móvil, con que se quedarían. Y sólo una pequeña proporción de los entrevistados eligió a la madre o a la pareja; la mayoría optó por el móvil. Eso sí, cuando les dijeron, que harían en el caso de que el búnker no dispusiera de wifi, respondieron entonces que se irían con la pareja o la madre. Esto da que pensar. Ellos con el móvil tienen acceso a internet, pueden chatear con distinta gente… Para ellos, el móvil era más interesante que estar con una persona allegada.
¿Pérdida de contacto físico?
El contacto es ahora más virtual. No descubro nada. Ahí está la imagen de una familia que se va a un restaurante y están todos con el móvil. Y parodias. Hay una de José Mota que está la familia en casa y habla entre sí con el móvil. Yo he observado a niños que envían un Wathsaap a sus padres desde la habitación. Yo no diría que las relaciones hayan disminuido -a través del chat posiblemente te comunicas más horas que antes- pero lo que ocurre es que la relación es virtual. Incluso existe un regusto para que sea más virtual que presencial. Tu puedes encontrar una persona que le resulta más fácil ligar o incluso romper con la pareja a través de un entorno virtual en lugar de hacerlo tomándote un café.
¿Cómo combatir los trastornos psicológicos?
La psicología dispone de procedimientos terapéuticos que se han mostrado eficaces a partir de la investigación para abordar patologías de todo tipo. No es que seamos eficaces absolutamente en todo pero dentro de las que hemos ido comentando, los problemas de estrés, la ansiedad y la depresión, son sensibles a las intervenciones terapéuticas. Sí que contamos con estrategias terapéuticas que son eficaces para diferentes trastornos.
Una de las terapias que se indican es la relajación
La relajación es una técnica incorporada desde hace muchas décadas a la psicología. La relajación viene a ser para los psicólogos algo así como la aspirina para los médicos. Es una estrategia básica. Últimamente ha aparecido dentro de este ámbito de intervenciones lo que se denomina “mindfulness”, que es una técnica claramente derivada de la meditación budista y que ha sido investigada científicamente ya desde los últimas décadas empezando por Estados Unidos y continuando por todo el mundo. “Mindfulness” es una técnica de elección para condiciones de estrés, ansiedad y recaídas en depresión. Pero a pesar de toda la moda, esa práctica solo da resultado en un ámbito reducido de patologías.
¿En qué consiste?
Es una herramienta, una estrategia, que trabaja con la atención, con la capacidad de autorregulación emocional que tiene la atención. Consiste en un procedimiento por el cual vamos a atender con aceptación ecuánime todos nuestros procesos psicológicos. Es decir, vamos a ser más conscientes del proceso cognitivo de la información, de nuestras sensaciones y, por lo tanto, de nuestras emociones. Y esa conciencia será una conciencia de aceptación ecuánime de lo observado, de tal manera que se produce una aceptación. Es una técnica de interés para la autorregulación de distintos procesos de alteración del estado del ánimo en general, si bien es verdad que da resultado para combatir el estrés y la depresión y también en el dolor crónico pero no más allá de eso. Tiene cierto emparejamiento con técnicas de relajación, como el yoga, pero el “mindfulness” trabaja con la conciencia, la atención. Más que pelearse con lo que ofrece la conciencia es aceptar lo que ofrece la conciencia, aunque aceptar no quiere decir resignarse a ello.
¿La búsqueda del deseo, de la felicidad, puede llevar a una situación de ansiedad?
Uno desea cuestiones agradables y desprenderse de lo desagradable. Ese afán por lo agradable y aversión por lo desagradable es fuente de sufrimiento. De alguna manera, “mindfulnnes” tiene que ver con esto y yo he investigado un poco sobre ello.
¿Por qué estudió Psicología?
Porque desde muy pequeño me interesó conocer la mente humana. Fue mi gran pasión. Conocer las razones por saber cómo somos y qué podemos hacer para mejorarnos a nosotros mismos.
¿Qué ha aprendido hasta hoy?
Yo he ejercido psicología clínica durante muchos años e intensamente. Ahora no. Ahora estoy concentrado en la docencia y en investigación, y también en la gestión. Soy decano de la facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned) y presidente de la Conferencia de Decanos de Psicología de las Universidades Españolas. La gestión me ocupa mucho tiempo pero saco horas para la docencia y el estudio aplicado. Un aprendizaje que me llama mucho la atención es cómo la mente humana se las ingenia para meterse en sufrimiento de una manera que no corresponde, a veces, con los problemas reales que uno tiene. A veces si que la angustia va asociada a un problema real. Si una persona se queda sin trabajo, con cargas familiares, es relativamente lógico intuir cuál va a ser su reacción emocional. Pero lo más sorprendente es, como en muchas ocasiones, en la mente humana nos generemos un sufrimiento injustificado y difícil de explicar a partir de predisposiciones psicopatológicas y de la personalidad que tenemos. Al mismo tiempo es increíble también la mucha resistencia que tiene la mente humana para cambiar, para hacer una gestión de las situaciones, de manera que sufra menos.