La secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresas, Irene Garrido, ha afirmado hoy que ni salarios ni pensiones han perdido poder adquisitivo en 2016 a pesar de la subida del 1,6 % del índice de precios de consumo (IPC) en diciembre, ya que la tasa media anual arroja un descenso del 0,2 %.
En una rueda de prensa, Garrido ha dicho que “la realidad” es que durante los primeros ocho meses del año no se ha producido un descenso de la capacidad de compra, en tanto que en “los tres o cuatro últimos meses sí ha subido el IPC”.
En este sentido, ha incidido en que como la media anual es negativa las pensiones “efectivamente no han perdido poder adquisitivo en término medio”, debido a la revalorización de estas prestaciones del 0,25 % en 2016, la subida mínima garantizada por ley.
Sin embargo, al tener en cuenta la subida de los precios con la que se ha cerrado el año (1,6 %), las pensiones y los salarios pactados en convenio (cuyo incremento fue del 1,06 %) habrían perdido poder adquisitivo, concretamente un 1,35 % y un 0,54 %, respectivamente.
Garrido no ha querido opinar sobre la propuesta de la CEOE de subida salarial para 2017 -que contempla un incremento de hasta el 1,5 % y otro adicional de hasta el 0,5 % vinculado a la productividad de las empresas y la reducción del absentismo laboral- al ser “salarios en el sector privado”, y ha añadido que el Gobierno tiene “total respeto a lo que acuerden” patronal y sindicatos.
En su intervención, también ha indicado que el Ejecutivo no piensa que el precio de la cesta de la compra “se va a disparar”, debido a que la subida producida en términos anuales se debe a un “efecto base” como consecuencia de que hace un año “estuvo muy bajo el precio de los combustibles”.
La secretaria de Estado ha resaltado que la subida de la inflación “se debe principalmente a la aceleración de los precios energéticos, en especial de los combustibles y carburantes”.
También ha subrayado que la inflación subyacente (una vez eliminados los elementos más volátiles de la cesta de la compra: la energía y los alimentos frescos) se situó en el 1 %, dos décimas por encima del mes anterior.
Garrido ha considerado que la subida del IPC Armonizado (IPCA) -que mide la evolución de los precios con el mismo método en todos los países de la zona euro- al 1,4 % interanual, nueve décimas más que el mes anterior, no es un dato preocupante al estar “dentro de la línea y de lo que ocurre en el resto de Europa”.