La recogida selectiva se ha estancado en la comarca y difícilmente cumplirá los objetivos europeos para el año 2020, la generación de residuos aumenta y los costes del tratamiento se dispararán. En ese contexto, los ayuntamientos de la comarca están revisando el modelo de gestión de residuos de 1993 con el objetivo de aumentar la recogida selectiva y abaratar costes.
En verano se celebró la primera reunión de la Taula del Pla Comarcal de Gestió i Prevenció de Residus y Recursos del Vallès Occidental (PREVOC), integrada por 19 ayuntamientos y la Agencia Catalana de Residus, así como diversas entidades, instituciones comarcales y empresas del sector. Juntos tienen como objetivo repensar el actual modelo de gestión de la basura, 23 años después de que la comarca apostara por la recogida selectiva.
Durante la reunión se presentó la diagnosis actual de los residuos en la comarca, una radiografía que, con los datos en la mano, dibuja un futuro menos sostenible medioambiental y económicamente. El porcentaje de recogida selectiva en el Vallès Occidental se sitúa en el 34%, por debajo de la media catalana, y la generación de residuos en casa ha repuntado un 2%. Esta tendencia podría consolidarse al alza si se confirma la recuperación económica y del consumo.
La diagnosis también pone en evidencia la existencia de una importante disparidad en la tasa de residuos que abonan los ciudadanos de los distintos municipios vallesanos. Desde la cuota más económica de Vacarisses (48,28 euros), hasta la más cara de Gallifa, donde los vecinos abonan una tasa media de 190,25 euros. Terrassa se sitúa en la franja baja con 91,48 euros anuales, 28 más que Sabadell, donde la tasa es de 63,58 euros, y 18 menos que en Rubí (109,86 euros).
En la primera jornada de trabajo, el pasado julio, los representantes comarcales pusieron el foco en los tres aspectos que protagonizarán el debate: la fiscalidad, la recogida y la prevención. Cada uno de esos bloques temáticos se analiza en el marco de cuatro comisiones de trabajo que ya han apuntado las primeras propuestas de futuro.
En el ámbito fiscal, se propone aplicar medidas que incentiven la separación de residuos en casa. El equipo ha analizado las experiencias en varios países europeos donde se aplican incentivos fiscales, bonificaciones y penalizaciones como herramientas de estímulo a un comportamiento más sostenible.
La comisión también apunta la necesidad de avanzar hacia una mayor homogeneización de las tasas de residuos en la comarca.
Por lo que respecta a los sistemas de recogida, el equipo que ha abordado el tema plantea la oportunidad de ampliar la recogida puerta a puerta en los municipios pequeños y en determinadas zonas de las grandes ciudades. También sugiere implantar contenedores con boca más ancha, promocionar el sistema de devolución, depósito y retorno de envases, y crear recogidas específicas para el comercio y los servicios.
En el ámbito de la prevención, se propone incentivar el reciclaje, así como participar activamente en la Semana Europea de la prevención de Residuos y en el Clean up Day.
Herencia medioambiental
“Necesitamos hacer una reflexión conjunta para cambiar el modelo se gestión de residuos -afirma el presidente del Consorci de Residuos del Vallès Occidental, Ricard Torralba-. Estamos hablando de la herencia que dejaremos a nuestros hijos y a nuestros nietos”. Torralba invita a los representantes municipales a “dejar los colores políticos a un lado” en un debate tan trascendente como el futuro de los residuos que generamos.
El director de la Agència de Residus de Catalunya, Josep Maria Tost, también ha celebrado la iniciativa vallesana de repensar el modelo de gestión de residuos y ha tomado nota del gesto comarcal. “Este es un tema de país -afirma-. Será necesario que las fuerzas con presencia en el Parlament hagan el mismo ejercicio que hace el Vallès Occidental para entrar en un nuevo paradigma en la gestión de residuos”.
Tost cree que ha llegado el momento de “replantearnos como consumimos y gestionar los residuos de otra manera, para gestionar la basura como recursos que conviene optimizar”. En ese paradigma “la fiscalidad es clave”. “Sabemos que no es fácil cambiar el modelo, pero debemos garantizar los recursos a las generaciones futuras”.