El éxito de ventas del Black Friday vaticinaba un arranque espectacular de la campaña comercial de diciembre, que finalmente cierra con un balance desigual, según explican desde Terrassa Centre, la entidad que agrupa al comercio del centro de la ciudad. "Pensábamos que iría muy bien pero no hay una respuesta homogénea -explica María Costa-. Para el sector de la electrónica las ventas han ido mejor que otros años y para el de la moda la campaña empezó con mucha fuerza pero después se ha frenado". En la otra cesta de la balanza se sitúan los comercios de la equipación de la persona, que "han visto bajar sus ventas".
Entre las cadenas comerciales que pueblan las calles más transitadas del centro histórico, ninguna de ellas asociada a Terrassa Centre, el balance es más positivo. En Zara explican que la tienda cerró un mes de noviembre extraordinario respecto a años anteriores gracias al Black Friday. La jornada de descuentos "llevó a muchos clientes a adelantar las compras de Navidad y los regalos y eso se ha notado en diciembre", explican en la tienda de Rambla. El último mes del año las ventas "han ido bien, pero han faltado las habituales prisas de última hora".
Esa percepción contrastaba ayer con un centro urbano atestado de coches desde primera hora de la mañana y de ciudadanos apresurados de tienda en tienda. Lo mismo ocurrió en Parc Vallès y en el resto de ejes comerciales de la ciudad.
