"Terrassa ha sido construida bajo la premisa de cuarenta años de régimen del PSC", con diversas familias de los socialistas turnándose "para gobernar sucesivamente". Así de contundente se ha mostrado Podem Terrassa en un escrito en el que deja clara y meridiana su oposición a la posible incorporación de Terrassa en Comú (TeC), confluencia en la que participa, en un gobierno municipal con el PSC.
Y sigue: "los diferentes clanes han situado a amigos e hijos en los sitios claves para lograr sus aspiraciones, infiltrándose en los servicios municipales en todos los niveles". Podem critica la "situación de clientelismo y amiguismo" socialista que TeC ha denunciado.
La coalición ha hecho bandera "de la necesidad de acabar con la connivencia" del PSC "con los intereses económicos de la ciudad", recuerda Podem, que rememora el intento de TeC de formar un gobierno de coalición con ERC para formar gobierno soberanista, "pidiendo a CiU que apoyara el cambio envolviéndose en la bandera del ‘procesismo’ para arrastrarlos en su intento de ocupar el sillón de la alcaldía". La formación morada sometió el anuncio a consulta y la inmensa mayoría de participantes en su asamblea rechazó los acuerdos. "Podem Terrassa no apoyó a TeC para que se convirtiera en la muleta del PSC", dice el comunicado.
Terrassa en Comú representaba el cambio, "el progresismo frente al inmovilismo de una fuerza que ha estado en el poder de manera ininterrumpida en la ciudad durante cuarenta años con un modelo político que se está agotando", dice Podem, consciente de que los acercamientos al PSC alejan a TeC de su militancia "y sus posibles votantes". El partido morado afirma que el cambio de actitud del PSC en el modelo de gestión del agua, alegado para una posible alianza, fue mera estrategia electoral.