La carrera de Luna Cohen ha dado un salto tanto cualitativo como cuantitativo desde que se mudó a Londres. En cantidad, resalta el aumento de su actividad en directo, el número de sus experiencias, el incremento de su público, de sus colaboraciones… Londres es otra cosa, una ciudad inmensa, cosmopolita, con una actividad musical inacabable e inabarcable.
En calidad, a Luna Cohen le ha sentado muy bien (y esto queda patente en su último disco) el cielo de Londres. "November Sky", el título del trabajo, se refiere a ese contexto en el que han nacido muchas de sus mejores canciones hasta la fecha, y donde ha encontrado valiosas complicidades, como la de Rob Luft, para desarrollar y arropar composiciones en las que ha "sacado las vísceras", como ella misma ha llegado a comentar.
Cierto es que este empuje no habría existido de no ser por un bagaje anterior que ya apuntaba maneras, en la voz y en la pluma de una vocalista y compositora sensible y sólida. Precisamente ese bagaje es el que le ha permitido crear una parroquia de fieles en Terrassa, que no le fallaron el pasado viernes en su concierto de la Cava.
Luna Cohen volvía a Terrassa, la ciudad en la que vivió durante años y a la que la atan fuertes vínculos, personales y profesionales, por lo que una vez sobre el escenario la emoción se desató. No la ayudó que la primera canción de su repertorio fuera precisamente "Rio doce", la misma que abre su trabajo y una de las que más la remueven.
Disco muy personal
Es éste un disco muy personal, con un fuerte anclaje en su vida familiar, emotivo y a la vez no exento de la alegría y los ritmos contagiosos de la Música Popular Brasileña (más allá de la bossa nova y la samba.)
A lo largo de las canciones de su disco, con la complicidad de una banda que acentúa con gran solvencia los pasajes más jazzísticos, Luna Cohen dio cumplida cuenta de cómo su voz ha ido creciendo en matices, complejidad, profundidad. Desde que comenzó su carrera ya se mostró como una excelente cantante, y poco a poco ha ido desvelando una labor compositiva cada vez más intensa y perfeccionada, emotiva y a la vez alegre, una combinación que se nos antoja genuinamente brasileña. Canciones con materias de inspiración como los miembros de su familia (su abuela en "Minha avo" o su sobrino en "Cadim"), y canciones de la entidad de "November Sky" o "Just a Song" (a veces secundada en la composición por Luft o Jurandir Santana), o incluso sus versiones de Joao Bosco o Milton Nascimento, son ejemplos perfectos de su estado de gracia.
