La empresa mixta Tmesa ya ha encargado la compra de quince nuevos autobuses a distintos proveedores. Los vehículos, que contribuirán a renovar la envejecida flota del operador, deben construirse expresamente, por lo que no empezarán a llegar a Terrassa hasta la primavera del próximo año.
Después de un largo proceso de licitación (la inversión se aprobó en el pleno del mes de febrero), el Ayuntamiento acaba de decidir las empresas que construirán los nuevos vehículos. No será una única compañía ya que el contrato, que implica un desembolso de 4,3 millones de euros, se ha dividido en cuatro lotes.
La mesa de contratación ha valorado las ofertas presentadas, en función de la propuesta técnica, económica y los plazos de entrega de cada una, y ha trasladado su dictamen al consejo de administración de Tmesa. El lote de cuatro autobuses de 12 metros con motor de gasoil irán a parar al grupo MAN. Esta misma empresa se encargará de proveer también otros cuatro vehículos de 18 metros de gasoil. El microbús que se destinará al transporte de personas con movilidad reducida y que cubrirá el servicio del centro de día La Pineda lo fabricará Iveco. Y, por último, los seis autobuses de 12 metros de motor híbrido se han adjudicado a Volvo.
La compra de estos vehículos ayudará a renovar la flota de Tmesa, formada por 65 autobuses. La llegada de éstos nuevos implicará la retirada de la circulación de los quince vehículos más antiguos.
Híbridos y diésel
El Ayuntamiento asegura que la entrada en funcionamiento de estos autobuses supondrá para los usuarios mejoras en confort y seguridad, aunque matiza que ésta ya está garantizada por las revisiones periódicas a que se someten los vehículos. También señala que supondrá una substancial reducción del impacto ambiental del transporte público en la ciudad; cuestión muy controvertida ya que desde la oposición de izquierdas (TeC, ERC-MES y CUP) consideran que la apuesta por los autobuses híbridos debería haber sido más ambiciosa.
Esta será la primera vez que la flota de Tmesa incorpora vehículos híbridos (un total de seis), que combinan el motor diésel con la tecnología eléctrica. Estos modelos implican un importante ahorro de consumo de combustible y emisiones, alrededor de un 30% respecto a un motor diésel convencional.
En un primer momento, la previsión del bipartito era que los nuevos autobuses llegasen a finales de este año, al menos, algunos de ellos, pero finalmente el retraso en la adjudicación no hará posible que entren en funcionamiento antes de la primavera de 2017.