Los alumnos de estudios no universitarios estudian en casa. Así lo constata la encuesta de movilidad escolar que ha divulgado el Institut d’Estadística de Catalunya (IEC) con los datos de la población escolar del curso 2015-16. La misma explica que Terrassa tenía ese ejercicio un total de 38.923 estudiantes residentes, de los que un 91,5 por ciento realizaban sus estudios en el mismo municipio y sólo 3.300 (un 8,5 por ciento) lo hacía fuera del mismo.
Asimismo Terrassa fue durante ese mismo curso receptora de alumnos de otras ciudades. En concreto fueron 2.132 los niños y jóvenes que se desplazaron para estudiar en la ciudad. El saldo final es que había 37.790 puestos de estudio localizados.
Los datos sobre movilidad escolar de Catalunya explican que en el curso 2015-16 había un total de 1.2015.764 alumnos que residían y estudiaban en la comunidad enseñanzas no universitarias. Un 84 por ciento de estos estudiantes (1.013.202) realizan sus estudios en el mismo municipio donde residen. Este porcentaje aumenta hasta el 92,1 por ciento para los alumnos de educación infantil de segundo ciclo (de 3 a 5 años) y al 88, 2 por ciento en el caso de los que cursan estudios obligatorios (primaria y ESO). En cambio cuando se llega a la posobligatoria (bachillerato y ciclos formativos) hay un cambio de tendencia y la proporción baja al 58,9 por ciento.
Por etapas
El Idescat subraya que en la etapa de las enseñanza obligatoria hay muy pocos desplazamientos en la medida que familia y alumno buscan centros educativos próximos al domicilio familiar o al puesto de trabajo si es que este último también se halla dentro del municipio de residencia. Así, la mayoría de ciudades registran porcentajes superiores al ochenta por ciento de alumnos que estudian y viven en el mismo municipio.
Por el contrario cuando se empieza la etapa de los estudios posobligatorios, se produce una mayor movilidad, que puede estar motivada porque no todas las ciudades disponen de la oferta de títulos que hay en el catálogo ni tampoco de plazas suficientes para la demanda generada .
De todos modos, Terrassa por superar los 200 mil habitantes sería una excepción puesto que acoge una amplia oferta en bachillerato público y privado, y también de formación profesional, así como otros programas de inserción laboral.
En la misma línea se halla, por ejemplo, Sabadell. En cambio, estudiantes de municipios del entorno como Viladecavalls o Matadepera, que no superan los diez mil habitantes, son los que más propensos a estudiar fuera de su lugar de residencia.