El Institut Industrial ha donado a la Fundació Arxiu Tobella parte de su fondo documental histórico. Ayer, Josep Armengol y Ramon Palau, presidentes del gremio textil y de la citada fundación, respectivamente, firmaron el acuerdo de donación de este valioso material que, de hecho, está en manos del archivo desde 2013. El legado se compone de 89 volúmenes y 8,75 metros lineales de documentos administrativos que hacen referencia básicamente al periodo que va desde finales del siglo XIX y hasta el año 1936, y también aunque en menor medida a la segunda parte del siglo pasado.
Según explicó Ramon Palau, en estos dos años Ricard Gomis, bajo la supervisión de Judit Tapiolas, ha realizado un arduo trabajo de documentación y catalogación del legado, que ahora está preparado para que "los historiadores hagan el trabajo de investigación". La firma del convenio se celebró ayer por la tarde en la sede de la Fundació Arxiu Tobella.
Los documentos son copias de cartas, diarios de contabilidad, cartas de entradas de filiales al gremio textil, como la Constructora Terrassense, entre otros. Aunque es una donación muy valiosa por la información que puede ofrecer, no son en ningún caso, puntualizó Ramon Palau, documentos "fundamentales" para el Institut Industrial, como los libros de actas. Josep Armengol, por su parte, agradeció la función que realiza el Arxiu Tobella para preservar la memoria no solo del gremio textil, sino de las instituciones e entidades egarenses, un legado que "si no fuera así se perdería".
Dinero para los soldados
Durante el acto, Palau hizo referencia a algunas de las informaciones que aparecen en los documentos y que prueban su riqueza. Por ejemplo, en las copias de algunas cartas se reseña "la recogida de dinero para los soldados terrassenses que estaban en la Guerra de Marruecos en 1921" o la queja del gremio por el mal funcionamiento de los ferrocarriles a su paso por la ciudad en 1922, y especialmente es llamativa la reivindicación para que se cubrieran los andenes de la estación de la ciudad, lo que se calificaba de "urgente" porque era molesto para los usuarios "en días de lluvia".
Otros documentos, referentes a los años entre 1902 y 1921, explicó Palau, exponen la defensa que el Institut Industrial realiza de los comercios y las empresas terrassenses "respecto al resto de España, lo que pone en evidencia la importancia de la industria de la ciudad ya en aquellos años".
El presidente de la Fundació Arxiu Tobella remarcó, en su intervención, algunos hechos muy significativos. Como, por ejemplo, la afiliación al Institut Industrial de la Constructora Terrassense en 1902, una empresa que prolongó su actividad hasta 1916. Fue una sociedad que se dedicó básicamente, dijo Palau, a la "construcción de casas baratas para los obreros y para atraer mano de obra a la ciudad".