Los testigos lo vieron en el suelo. Parecía inconsciente. Un enorme charco de sangre circundaba su cabeza. Fue una de las víctimas, la de mayor gravedad, de una reyerta que se desencadenó el domingo en la carretera de Castellar.
Los Mossos d’Esquadra investigan los hechos después de recibir una denuncia. La refriega ocurrió a eso de las siete de la mañana. Al parecer, según la información que ha trascendido, el agredido y un amigo habían pasado parte de la noche en una discoteca ubicada muy cerca, en la calle de Tàrrega.
Salieron del local y se desató la trifulca, posiblemente nacida de un encontronazo previo en el establecimiento o sus aledaños, aunque los mossos investigan también si entre agresores y víctimas se dio otro tipo de tensión relacionada con un intento de robo. Lo cierto es que, según la policía, hubo más de un herido, aunque un hombre salió muy mal parado.
Testigos
Los servicios sanitarios lo atendieron en la carretera de Castellar, donde yacía en aparente estado de inconsciencia. Le manaba gran cantidad de sangre de la cabeza, parece que debido a golpes ocasionados con botellas. Fue trasladado a Mútua Terrassa en estado de gravedad, aunque fuentes próximas a la investigación apuntaron ayer que su pronóstico había pasado a ser "menos grave". La Policía Municipal identificó a varios testigos, que serán llamados a declarar.
Otra refriega, una pelea multitudinaria, tuvo lugar el fin de semana en la calle del Duero. Se saldó con varios heridos, ninguno de ellos grave.