La Diputació de Barcelona destinará casi 3,7 millones de euros a reforzar el tejido empresarial local y a mejorar su solvencia económica favoreciendo la inversión en equipamientos e infraestructuras del Vallès Occidental. El nuevo programa de apoyo a la inversión local, que está destinado a los ayuntamientos y las cuatro entidades municipales descentralizadas de la provincia, cuenta con una dotación total de veinte millones de euros. Según informa el ente supramunicipal, el Ayuntamiento de Terrassa recibirá un total de 811 mil euros, el de Sant Cugat, 333 mil, y el de Rubí, 281 mil euros.
El apoyo a la pequeña y mediana empresa tiene un innegable impacto económico y puede promover una especialización de la producción, y, también, de la comercialización de los productos propios de un territorio determinado. Es por este motivo que este nuevo programa promueve la contratación de pequeñas y medianas empresas para favorecer el desarrollo económico local, mejorar las oportunidades laborales y contribuir a garantizar la cohesión social.
La distribución de los veinte millones de euros de este programa tiene la voluntad de garantizar una distribución justa y objetiva. Se asigna un importe inicial de diez mil a todos los entes destinatarios con el objetivo de asegurar el equilibrio territorial y el apoyo a los pequeños municipios, y se completa la distribución con las variables población, extensión y capitalidad comarcal.
Criterios
Cada una de las 314 corporaciones destinatarias deberá aceptar las ayudas antes del 31 de enero de 2017 y podrán justificar actuaciones ejecutadas entre el pasado 1 de julio y el 30 de septiembre de 2017. Los programas complementarios que promueve la Diputació de Barcelona forman parte del Plan "Red de Gobiernos Locales 2016-2019". Mediante este plan, la Diputació trabaja con los ayuntamientos para canalizar la transferencia de recursos económicos, técnicos y materiales a los gobiernos locales.
También forman parte del Plan "Red de Gobiernos Locales 2016-2019" las mesas de concertación (espacios entre los representantes de la Diputació y de los gobiernos locales, en los que se contrastan las necesidades y se establecen acuerdod sobre las actuaciones del mandato y también de los recursos existentes), y los catálogos de servicios (ofertas periódicas de recursos que la Diputació de Barcelona presenta a los entes locales en formato de libro electrónico para satisfacer sus necesidades).