La alcaldesa de Berga (Barcelona), Montse Venturós (CUP), ha aceptado hoy declarar al fiscal y al juez, tras ser detenida por los Mossos d’Esquadra por orden judicial por haber plantado en dos ocasiones al magistrado que la investiga por dos delitos electorales.
Según han informado fuentes judiciales, Venturós ha declarado hoy durante veinte minutos ante el titular del juzgado de instrucción número 1 de Berga, que ayer ordenó a los Mossos d’Esquadra que la detuvieran y trasladaran al juzgado, tras haberle plantado el 5 de abril y el 17 de octubre, cuando debía comparecer por mantener la “estelada” en el consistorio en las elecciones del 27S y el 20D.
Tras la lectura de derechos, el juez ha recordado a la alcaldesa, como es habitual en las comparecencias de investigados, de que podía acogerse a su derecho constitucional a no declarar o a contestar solo a las partes o a las preguntas que considerara oportuno.
La alcaldesa, sin embargo, ha manifestado que tenía el propósito de prestar declaración y ha respondido a las preguntas formuladas tanto por el juez, Albert Ejarque, como por el fiscal, que la acusa de dos delitos electorales, así como por su propio abogado, el diputado de la CUP en el Parlament Benet Salellas.
En su declaración, Venturós ha defendido que no se esconde y ha alegado que no retiró la “estelada” porque se mantiene “firme” en el “mandato popular” que avalaba la colocación de la insignia, ya que la decisión fue aprobada por un pleno municipal, según ha afirmado ella misma ante la prensa a la salida del juzgado.
Los Mossos d’Esquadra han detenido a las 7.55 horas esta mañana en su domicilio a Venturós por orden judicial y la han trasladado a los juzgados de esta localidad barcelonesa para que el juez la pudiera interrogar.
Los agentes de la policía catalana han llamado al timbre del piso de Venturós hacia las 7 de la mañana y le han comunicado que iban a detenerla, pero que le daban tiempo suficiente para llevar a cabo las gestiones que considerara oportunas antes del arresto, por lo que ésta ha llamado a su abogado.
Cuando Venturós ha salido de su casa, hacia las 7.55 horas, los Mossos d’Esquadra la han detenido y la han trasladado en un vehículo policial directamente a los juzgados.
Los agentes han actuado vestidos de paisano con el fin de garantizar al máximo la discreción en la detención de la alcaldesa, para preservar su intimidad, después de que el juez les diera instrucciones para que el arresto se produjera en el “modo, momento y lugar que resulte menos perjudicial” para ella.
La alcaldesa plantó el pasado 17 de octubre por segunda vez al titular del juzgado de instrucción número 1 de Berga, que la había citado como investigada por mantener la ‘estelada’ en la fachada del consistorio durante las elecciones catalanas del 27S y generales del 20D, en un acto que ella misma calificó de “desobediente”.
En sus citaciones, que Venturós desoyó, el juez ya le advertía de que si no comparecía podía ser sancionada con una multa de entre 200 y 5.000 euros, según recoge el artículo 175.5 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, o que incluso podía ser detenida para forzarla a comparecer, en base a los artículos 587, 935 y 148 de la Lecrim.
Tras quedar en libertad una vez ha declarado, el juez ha dictado un auto en el que recuerda a la alcaldesa su obligación de comparecer ante la justicia siempre que se la requiera y le advierte de que podría ser detenida y, en su caso, encarcelada, de no hacerlo.
Arropada por Salellas, Venturós ha abandonado los juzgados poco después de las 12.00 horas y ha sido recibida por aplausos por un centenar de personas que aguardaban en el exterior para mostrarle su apoyo.
