El Ayuntamiento de Sant Cugat ha impulsado una prueba piloto consistente en introducir un rebaño de ovejas y cabras en el Parc Natural de Collserola para mantener limpias las franjas de protección de incendios forestales. La presentación, del proyecto, a cargo del concejal de Medio Ambiente, Joan Puigdomènech, contó con la presencia de Cristina de Llanos, una de las dos pastoras contratadas para encargarse del rebaño.
La iniciativa, que se lleva a cabo con éxito desde hace años en Matadepera, se pone en marcha esta semana y en un principio tendrá una duración de un mes y medio. El rebaño procede del Berguedà y está formado por unas 120 reses, de las que aproximadamente un 90% son ovejas y un 10%, cabras. Los animales se irán moviendo por las zonas de Sant Medir, Sol i Aire y el entorno de la Torre Negra.
"Con este proyecto que ponemos en marcha como prueba piloto", remarcó en la presentación Puigdomènech, "pretendemos hacer una gestión forestal más eficiente. Una vez hecha esta prueba, valoraremos si el rebaño se ha adaptado al entorno de Collserola y también cómo ha ido la convivencia con la ciudadanía".
Años atrás, la Serra de Collserola era una zona donde se practicaban la agricultura y la ganadería, pero con el paso del tiempo se han ido abandonando y la sierra se ha reforestado mucho. Con una mayor masa forestal, existe un riesgo de incendios más elevado y, además, en caso de incendio se complica su extinción. Es muy necesario, por tanto, hacer una correcta gestión forestal para disminuir riesgos.
Atar a los perros
Actualmente se realiza la limpieza de franjas de protección de incendios con maquinaria. Para reducir el impacto del uso de estas máquinas -ruidos, emisiones de gases contaminantes a la atmósfera…- se plantea recuperar el uso de la ganadería, puesto que los rumiantes como las ovejas y las cabras son desbrozadores naturales que, sin hacer ruido ni gastar combustible, van transformando la biomasa con carne, lana y leche. Además, poner en marcha un rebaño genera puestos de trabajo para pastores y puede favorecer el comercio de proximidad con una posible comercialización de carne, leche o queso.
Para que esta prueba piloto sea un éxito, el Ayuntamiento hace un llamamiento a la ciudadanía para que en caso de encontrarse con el rebaño se aten a los perros para no asustar los animales y para que no se dé de comer al ganado. "Las personas se pueden acercar a preguntarnos cualquier duda y a mirar las ovejas", explicó Cristina de Llanos, "pero lo más importante es que nadie se ponga en medio del rebaño y que los perros vayan atados para no asustar el rebaño", advirtió.
LA CIFRA
120. Son las ovejas y cabras que conforman el rebaño que a partir de esta semana pastan en el Parc Natural de Collserola.