La renuncia al acta de diputado por parte del líder del PSOE, Pedro Sánchez, permitiría que en la sesión de investidura de esta tarde Mariano Rajoy sólo necesitase ya diez abstenciones socialistas, y no once, para ser reelegido presidente del Gobierno.
En la votación de hoy, Rajoy ya sólo requiere de una mayoría simple del Congreso para ser investido, es decir que tenga más votos a favor que en contra.
El número total de diputados que participarán en la votación será de 349, y no 350, porque no ha habido margen de tiempo suficiente para que el sustituto de Sánchez cubra los trámites correspondientes para ocupar el escaño.
En concreto, ese asiento le correspondería a la concejala del ayuntamiento de Madrid Carlota Merchán, que ocupó el puesto número 8 en la lista del PSOE por la circunscripción madrileña en las elecciones del 26 de junio y que debe decidir ahora si accede al Congreso o deja paso al siguiente de la candidatura.
De todos modos, nadie cubrirá hoy la vacante de Sánchez, y Rajoy contará con los apoyos de los diputados del PP, Ciudadanos, Coalición Canaria, UPN y Foro. Un total de 170 votos.
Hace 48 horas obtuvo 180 votos en contra, por lo que necesitaba que en la presente jornada, sobre el cómputo total de 350 diputados, se abstuvieran al menos once parlamentarios socialistas para garantizar que contaría con más votos a favor que de rechazo.
Al reducirse a 349 los diputados que votarán esta tarde, se rebaja también en una las abstenciones que necesitaría Rajoy para tener más “síes” que “noes”.