El BBVA tiene previsto el cierre de cien oficinas adicionales en España durante este año y la salida de unos cuatrocientos trabajadores, que unidos a los 1.556 que ya han abandonado la entidad tras la integración de CatalunyaCaixa, elevará la cifra hasta los 2.000.
La integración con la entidad catalana también ha supuesto ya el cierre de 436 sucursales según recordó ayer el consejero delegado de BBVA, Carlos Torres, en la rueda de prensa celebrada para presentar los resultados correspondientes al tercer trimestre del año.
Automatización
En su intervención, Carlos Torres explicó, asimismo, que como consecuencia de la gestión ordinaria del banco y su automatización, se van liberando muchas personas, que pasan a hacer otra actividad, pero también, va saliendo gente.