Las ordenanzas fiscales para 2017 saldrán adelante esta tarde con los únicos votos a favor del equipo de gobierno (PSC y CiU), que tiene doce concejales, pero con valiosas abstenciones, las de los once regidores que suman TeC, ERC-MES y la CUP. Los tres grupos de la oposición, tras conseguir modificar sustancialmente el dictamen inicial presentado por el Ejecutivo local, permitirán así que Terrassa actualice su cuadro de tributos locales.
El pleno extraordinario que se celebrará esta tarde será un trámite, y un debate de gran enjundia política, moderadamente plácido para el equipo de gobierno, comparado con las agitadas comisiones informativas previas en las que la oposición forzó la retirada del expediente de ordenanzas fiscales. Una vez reconducida la situación, pacto mediante con los grupos de izquierdas, todo hace prevér que los cambios en los tributos se aprobarán de manera inicial sin sobresaltos. A partir de aquí se abrirá el periodo de exposición pública para poder hacer alegaciones, con la previsión de aprobar definitivamente el dictamen el próximo 21 de diciembre.
No toda la oposición, sin embargo, está de acuerdo con la propuesta que hoy se lleva a discusión. Los tres ediles de C’s no la apoyarán ya que pedían la congelación general de impuestos. Tampoco el único edil del PP está de acuerdo. Proponía mantener los valores actuales al entender que dada la situación de crisis, las tasas negativas de inflación y "el mal funcionamiento" de algunos servicios, lo "lógico" hubiese sido congelar los tributos.
El Ibi se congela
El año que viene la mayoría de contribuyentes no notará un aumento del impuesto de bienes inmuebles (IBI). El gravamen general se mantiene tal cual. Sí se encarecerá el impuesto un 5% para el 10% de los valores más altos en los usos no residenciales. El resto de tributos, como el impuesto de construcciones o la plusvalía, subirán un 0,5%, excepto el IAE, que sufrirá cambios.
El Ayuntamiento aplicará una clasificación de calles en cinco categorías. Los grupos de izquierda han forzado que el valor máximo y mínimo que había hasta ahora en la clasificación de cuatro categorías no se toquen, y se han escalonado los tres índices intermedios. Para amortiguar el impacto en el IAE de esta revisión, se ha acordado que quien deba pagar más en 2017 lo haga un máximo de un 10% más.
Las tasas también subirán un 0,5%, salvo algunas destacadas excecpiones. La de residuos experimentará una subida del 5%. Otras muchas vinculadas a servicios básicos, como las de servicios sociales o las escuelas municipales, se congelarán.
