Al principio suele atribuirse a un picor pasajero, un síntoma que remitirá solo y no solemos darle la importancia que se merece. Sin embargo, detrás de esta simple irritación que se prolonga en el tiempo más de lo debido puede esconderse la urticaria crónica, una afección cutánea grave que padecen más de 300.000 españoles. Para dar a conocer más las características de este mal y sensibilizar a la población este sábado, 1 de octubre, se celebró el Día Mundial de la Urticaria Crónica.
La asociación de afectados responde a las diez preguntas más frecuentes en torno a una patología desconocida e infravalorada que tiene un gran impacto en la vida social, afectiva y laboral del enfermo.
1. ¿Es la urticaria crónica (UC) una alergia?
No. La UC no es una alergia. En algunos casos el origen puede ser autoinmune, por lo que se detectan anticuerpos que estimulan crónicamente los mastocitos que liberan histamina. En muchos otros casos no se identifica ninguna causa que la desencadene.
2. ¿Tiene cura?
Actualmente esta patología no tiene cura. Todos los tratamientos están orientados a paliar y controlar los síntomas. En un elevado porcentaje de casos los síntomas remiten espontáneamente antes de los 5 años. Pero en un 11% la prevalencia será mayor a 5 años.
3. ¿A quién hay que acudir?
Ante cualquier duda sobre el proceso, tratamiento o evolución de la enfermedad acudiremos a nuestro dermatólogo/a, ya que es el especialista que mejor podrá orientarnos. Es importante que confiemos en el médico y le preguntemos absolutamente todas aquellas cuestiones sobre la urticaria crónica que nos preocupen. También podemos acudir a la asociación de afectados y familiares de UC.
4. ¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de la urticaria crónica es clínico. Es decir, se tienen en cuenta la historia clínica y los síntomas del paciente. Todas las pruebas que el especialista prescriba están orientadas a descartar otras patologías con síntomas similares.
5. Me han diagnosticado urticaria crónica ¿Y ahora qué debo hacer?
Una vez diagnosticado/a el dermatólogo pauta un tratamiento que puede ser efectivo o no. En muchos afectados la enfermedad es difícil de controlar. Además, será de gran utilidad, llevar un registro de los brotes, número de ronchas, grado de picor, o limitaciones para que el dermatólogo efectúe una mejor valoración. No es mortal, pero afecta gravemente la calidad de vida. Por eso hay que conocerla bien, sentirse arropados y aprender a tener recursos psico-emocionales.
6. ¿Es posible padecer varios tipos de urticaria?
Sí. A menudo muchos afectados también padecen algún o algunos tipos de urticaria (dermografismo, urticaria por frío, solar, por presión retardada o por calor, inducida por el ejercicio o por contacto).
7. ¿Algún día desaparecerá?
Esta es la gran cuestión que muchos afectados se plantean sobre todo al principio y cuando no tienen controlada la enfermedad. Es posible, como ocurre en la mayoría de casos, que la UC remita antes de los 5 años. Sin embargo, también es posible que no sea así.
8. ¿Puedo comer de todo?
En principio no hay una relación directa con la alimentación. Sin embargo, algunos alimentos ricos en histamina y/o aditivos pueden agravar los síntomas, por lo que a veces es aconsejable evitarlos.
9. ¿Hay algunos medicamentos contraindicados?
Entre los fármacos que pueden agudizar los síntomas y que es preferible evitar destacan los antibióticos, antiinflamatorios no esteroideos, opioides, aspirina, psicotrópicos y hormonas.
10. ¿Influye el estrés?
Sí. El estrés puede empeorar el conjunto sintomático, pero a la vez los síntomas generan estrés. Este pez que se muerde la cola en ocasiones es difícil de disipar. De ahí que sea de gran importancia aprender a tener recursos para manejar el estrés de factores externos e internos.
