En el fragor de la discusión sobre el cuidado de la madre, un hombre acuchilló a su hermana en el pecho. Le dio varias puñaladas y a punto estuvo de matarla. De ello lo acusa el fiscal: de intentar asesinar a su hermana. Pide que sea condenado a una pena de doce años de prisión.
El procesado es un terrassense con un abultado historial de antecedentes policiales, drogodependiente y con una enfermedad mental. En Terrassa, en el domicilio familiar, donde el sujeto vivía con su madre, aconteció la disputa que originó el ataque homicida. Ocurrió durante el periodo navideño pasado, el 29 de diciembre del 2015. En la vivienda, unos bajos, estaban el acusado y sus dos hermanos, un hombre y una mujer.
Eran las ocho de la tarde, minuto arriba minuto abajo. Los tres se enzarzaron en una disputa verbal agria, de tensión desbordada, sobre el cuidado de la madre. Y a los pocos segundos corría la sangre. Según el fiscal, el acusado iba borracho. Agarró un cuchillo y con el arma asestó varias puñaladas a su hermana en el pecho. Una cuchillada entró un centímetro en el tórax, en el centro del pecho. Otras dos causaron heridas superficiales.
El otro hermano se interpuso y arrebató el cuchillo de las manos del agresor. Resultó herido por ello en dos dedos de la mano izquierda. Nada grave.
La hermana necesitó de un tratamiento médico-quirúrgico, con aplicación de puntos de sutura. El ataque no constituyó un mero delito de lesiones, o uno de homicidio intentado, de pena más leve que el asesinato, asegura el Ministerio Fiscal. Fue, según la acusación, un "delito de asesinato con alevosía en grado de tentativa". La razón: el atacante actuó "de forma sorpresiva y sin que la víctima pudiera defenderse", y su otro hermano tuvo que intervenir para evitar la continuación de la agresión. El procesado quería matar a su hermana o, cuando menos, sabía que su acto ponía en riesgo la vida de la víctima; sabía "de las altas probabilidades de causar su muerte". En efecto, la vida de la mujer habría quedado comprometida si no llega a recibir asistencia médica, según el fiscal.
Los Mossos d’Esquadra detuvieron al sospechoso poco después de los hechos. Al día siguiente lo pasaron a disposición judicial y el juzgado de instrucción número 2 de Terrassa resolvió su ingreso en prisión. La tramitación del sumario duró unos meses y la Audiencia Provincial de Barcelona tiene previsto celebrar hoy el juicio.
Agravante y atenuante
El fiscal pide una pena de doce años de prisión (y diez años más de libertad vigilada) por la tentativa de asesinato y una multa de novecientos euros por un delito leve de lesiones, por las heridas padecidas por el hermano que detuvo la agresión.
La acusación, sin embargo, aprecia la concurrencia de una circunstancia agravante, la de parentesco, y una atenuante analógica, la referente a la embriaguez del procesado cuando la agresión. "Presentaba un cuadro evidente de intoxicación etílica que pudo haber provocado alteraciones conductuales", dice el Ministerio Público después de reseñar la esquizofrenia paranoide, con dependencia de sustancias tóxicas, del encausado.