Nuevo golpe de los Mossos d’Esquadra a una plantación casera de marihuana. Casera porque estaba en un piso, no por su capacidad, pues la policía confiscó en la operación, desarrollada en el sector de Les Arenes-La Grípia-Can Montllor, 640 plantas de maría y más de veinticinco kilos de cogollos de la misma sustancia. Hubo dos detenidos y seis denunciados.
Unas informaciones sobre la sospechosa actividad que tenía lugar en una vivienda activó la investigación. Del domicilio surgía continuamente el ruido de aparatos de aire acondicionado, así como un olor intenso a cannabis. Agentes de la unidad de investigación de la comisaría de Terrassa se pusieron manos a la obra y empezaron a vigilar la vivienda. Y vieron tres aparatos de aire funcionando “a pleno rendimiento” y observaron también que varias personas entraban y salían del edificio trasegando bolsas de grandes dimensiones que cargaban en coches. Cuando consideraron que los indicios eran de suficiente entidad, los investigadores entraron en la casa tras recibir la autorización judicial.
Registro
Fue el 3 de septiembre, el sábado pasado, cuando agentes de la comisaría de Can Tusell irrumpieron en la vivienda. Allí sorprendieron a tres personas, dos hombres y una mujer, y en el operativo identificaron a cuatro personas más: se trataba de los ocupantes de una furgoneta que acababa de llegar a la zona. Esos individuos también han sido implicados, en mayor o menor medida, en la causa.
Llegó el momento de inspeccionar el domicilio, donde los mossos encontraron y decomisaron 640 plantas de marihuana y 22.650 gramos de cogollos en proceso de secado. Había más cannabis, según la policía: los agentes localizaron 2.400 gramos más de cogollos envasados en bolsas termoselladas que estaban en el interior de un congelador. El listado de sustancias confiscadas incluyó 15,3 gramos de hachís, quince cajas con anabolizantes y restos de testosterona y clembuterol. Los agentes se incautaron de 64 focos de luz de alta intensidad, veinticuatro ventiladores y 64 transformadores.
Gran rendimiento
Las plantas podían generar, cada tres meses, unos 41.400 gramos de maría, según los cálculos de los Mossos d’Esquadra. Y el cáñamo decomisado tenía un valor de unos 200.000 euros, en caso de venderse a gramos, y de 53.000 si hubiera sido comercializado a kilos.
Dos de los identificados fueron detenidos al ser considerados los responsables del grupo, aunque salieron en libertad del Palacio de Justicia poco después. Cinco más quedaron denunciados penalmente “por ayudar activamente al funcionamiento de la plantación” y un octavo individuo, al que buscaba la policía, se presentó de manera voluntaria en los Juzgados.
En las imputaciones figuran delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal y defraudación de fluido eléctrico; la instalación había sido manipulada para aumentar su intensidad y, según los mossos, el valor del fraude es de unos 64.000 euros.