El incendio forestal que comenzó hace seis días en la isla de La Palma, y que hoy ha quedado estabilizado, ha afectado al 6,8 por ciento de la superficie de la isla, un total de 4.863,99 hectáreas.
“El incendio no está controlado ni extinguido”, ha dicho la consejera de Sostenibilidad del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, quién en rueda de prensa ha señalado que el fuego si está estabilizado dentro de su perímetro.
La bajada notable de las temperaturas en las últimas horas (incluso con la entrada de niebla) ha facilitado la estabilización de este fuego, que ha afectado a 2.396,70 hectáreas del municipio de El Paso; 1.621,22 de Fuencaliente; 816,71 hectáreas de Mazo y 29,36 hectáreas de Los Llanos de Aridane.
Barreto ha advertido de que a partir del martes está previsto un nuevo aumento de las temperaturas por lo que se intentará controlar el fuego antes de que se comience esta nueva ola de calor anunciada para los próximos días.
Además, ha indicado que la población debe estar alerta para que no se vuelvan a producir incendios como este, que comenzó el pasado miércoles en el área rural de Jedey por una supuesta imprudencia de un joven alemán y que se ha convertido en el cuarto incendio más importante de los han afectado a Canarias durante este siglo.
La consejera autonómica ha afirmado que durante estos días han actuado 12 medios aéreos que han realizado 1.000 descargas de agua mientras que el operativo terrestre lo han formado unas 500 personas, con una media diaria de 300 trabajadores.
Al igual que el presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, Barreto ha advertido de que las primeras lluvias pueden causar daños por lo que hay que trabajar en las infraestructuras para contener y encauzar las aguas después de que se apague el fuego.
Ha adelantado que hasta que esté controlado se mantendrán los medios terrestres y aéreos que irán abandonando las labores de extinción de forma escalonada.
Para Barreto, “el trago más difícil” ha sido el fallecimiento del agente forestal Francisco Santana y ha agradecido a sus compañeros que continuaran trabajando a pesar de la tragedia.
Desde el comienzo del fuego ha habido “una entrega sin límite” y una “mano tendida” desde cada una de las administraciones, entidades y organizaciones que han colaborado y por ello, ha señalado, “nos hemos sentido arropados y acompañados”
Además, ha subrayado que la sociedad palmera se ha volcado en ayudar como ha podido y ha pedido a la población que no deje de avisar a los dispositivos de emergencia cuando vean un conato porque ello facilita su rápida extinción.
El presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, ha opinado que la isla tienen “una deuda de gratitud” hacia los que han colaborado en las labores de extinción de este fuego y ha destacado que una vez que se apague, comenzarán a preparar la isla para evitar que con las lluvias se produzcan riadas.
En las labores de extinción del fuego participan entre otros los gobiernos Autónomos y Central; los cabildos insulares de La Palma, La Gomera, Tenerife y Gran Canaria, la Unidad Militar de Emergencias, los ayuntamientos palmeros; las brigadas forestales, la Policía Canaria, policías locales, Guardia Civil, bomberos de varias islas, Cruz Roja, el Servicio de Urgencias Canario y el Servicio Canario de la Salud.