El portavoz del Partit Demòcrata Català (PDC), Francesc Homs, se emplazó ayer a una negociación discreta con ERC para explorar la posibilidad de formar un grupo conjunto en el Congreso y denunció los tics “chavistas” que observa en el presidente de Ciudadanos (C’s), Albert Rivera.
Varios diputados y senadores del PDC, encabezados por sus respectivos jefes de filas en Madrid, Francesc Homs y Josep Lluís Cleries, se reunieron con la plana mayor del partido, incluidos Artur Mas, Neus Munté, Marta Pascal y David Bonvehí, para analizar las consecuencias de la pérdida del grupo propio en las Cortes.
Tras la reunión, celebrada en la sede de CDC en el distrito barcelonés de Sarrià-Sant Gervasi ya que el nuevo cuartel general del PDC en la calle Provença aún está en obras, Homs se refirió a la posibilidad de que los diputados convergentes sean acogidos en el grupo de ERC, para evitar acabar en la bancada del grupo mixto.
Homs reveló que el martes ya tuvo un “intercambio de impresiones” sobre este asunto con el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, y reconoció que es un tema sobre el que habrá que hablar “en las próximas semanas”, pero se mostró partidario de no iniciar un “debate público” al respecto sino de mantener conversaciones discretas.
De entrada, Homs considera que una hipotética integración del PDC en el grupo parlamentario de ERC “no es una urgencia ni de hoy ni de mañana”, porque no se sabe si la legislatura “durará cuatro meses o cuatro años”.
De hecho, Homs cifró en un 85% las posibilidades de que el bloqueo de la investidura en España derive en unas terceras elecciones.
Sus críticas más ásperas fueron para el presidente de C’s, Albert Rivera: “Si se pensaba que con esta maniobra nos haría callar, que se olvide”. “No tiene ni puñetera idea de cómo funciona el plenario”, afirmó, y advirtió de que, incluso desde el grupo mixto, el PDC “plantará cara” en defensa de la hoja de ruta soberanista: “No se ahorrarán nuestra voz, nos oirán igual”.
Para Homs, el voto en contra de C’s a la constitución de un grupo propio para el PDC es “chavismo puro”, porque se deriva del siguiente razonamiento: “No me gusta mi adversario, pues lo veto por mayoría”. “Es lo que hace Nicolás Maduro con sus adversarios políticos”, añadió.
“destruir” el PDC
Por su lado, el expresidente de la Generalitat Artur Mas denunció ayer una operación coordinada del Estado y distintas fuerzas españolas con el fin de “destruir” el PDC, elemento “clave” para “inclinar la balanza” a favor de la independencia y frenar así el proceso soberanista. Mas expresó su “apoyo público” a los parlamentarios de la antigua CDC, a quienes han “intentado disminuir políticamente, silenciar y rebajar su perfil”, un episodio que contextualizó en el marco de una operación para “eliminar” lo que representa la formación.
