La tasa de residuos no se verá afectada en Terrassa de manera automática por el incremento de precios que el 1 de agosto aplicará el Centre de Tractament de Residus del Vallès. El vertedero de Coll Cardús limita a partir del lunes la entrada de basura y eso obligará a transportar al depósito de Pujals (l’Anoia) y al centro de tratamiento de Constantí (Tarragona) dos terceras partes de la fracción resto, lo que supone un encarecimiento de la tarifa de 1,85 euros por tonelada.
“No vamos a repercutir la subida a la ciudadanía de manera automática -explica Marc Armengol, teniente de alcalde de Territori i Sostenibilitat-. Contamos con una reserva en el presupuesto del canon autonómico, que la Generalitat no ha incrementado este año, y eso nos permitirá afrontar el incremento de la tarifa del CTR sin tener que repercutirlo en la tasa de residuos”.
El gobierno municipal tiene previsto revisar el importe de la tasa de residuos en otoño, en el marco de la elaboración del presupuesto municipal y las ordenanzas del ejercicio 2017. Ese año, el coste de la eliminación de la fracción resto volverá a dispararse.
Al aumento de 1,85 euros por tonelada derivado del transporte de la basura a otros puntos del territorio habrá que sumar el canon autonómico. La Generalitat no ha aplicado la subida de 2017 por que trabaja con presupuestos prorrogados, pero todo indica que aprobará las cuentas de 2017 y volverá a girar el tributo a los residuos. Su intención es escalar hasta los 50 euros por tonelada de la fracción resto en el año 2020.
Aún hay un tercer factor de incremento. En octubre el Consorci de Residus del Vallès Occidental
negociará con los gestores del CTR las tarifas correspondientes al próximo año, que podrían volver a subir.
En 2016 la tasa de residuos se congeló en Terrassa. El equipo de gobierno propuso una subida del 5%, pero la oposición forzó un rediseño del proyecto fiscal del gobierno, suprimiendo el incremento de la tasa y compensándola con un alza de la plusvalía.
El debate volverá a la arena política en octubre, coincidiendo con la negociación de las tasas y los impuestos de 2017. En este momento, la tasa de residuos cubre sólo el 70% del coste de la recogida selectiva, el tratamiento y eliminación de la fracción resto.
