Pocas veces los nombramientos de los representantes en los organismos en los que participa el Ayuntamiento causan el revuelo que ha despertado la designación de Xavier Lleonart en el consejo de gobierno del Consorci Sanitari de Terrassa (CST). Su elección ha sido posible gracias a los votos de TEC, ERC-MES, C’s y CUP. En cambio los dos socios del Ejecutivo local, PSC y CiU, además del PP, se han abstenido. La peculiaridad de este nombramiento reside en que Lleonart es el presidente del comité de empresa del CST, por lo que, por primera vez, los trabajadores estarán representados en el órgano de decisión de una de las organizaciones sanitarias más importantes de Catalunya.
El nuevo equilibrio de fuerzas surgido de las elecciones de 2015 ha obligado al equipo de gobierno (PSC- CiU) a hacer concesiones. Al inicio del mandato, se vio forzado a aceptar que la oposición eligiera al representante del Ayuntamiento en aquellos organismos en los que tuviera presencia.
El Consorci Sanitari es una de estas instituciones El Ayuntamiento está representado por el alcalde y por un miembro elegido por el pleno. Hasta este mandato, solía ser el concejal de Salud. Pero esto ha cambiado. Los grupos de la oposición acordaron turnarse en la designación, de manera que el elegido por cada uno de ellos estuviese durante nueve meses. Hasta el mes de julio ha estado Jose María Laín, médico del CST, a propuesta de C’s. Llegado el turno de la CUP, finalmente ha elegido a Lleonart, el candidato que también defendían ERC-MES y TEC, por lo que es de esperar que Lleonart ocupe asiento en el consejo de gobierno del CST durante 27 meses.
Dudas sobre la compatibilidad
No todos los grupos han estado a favor de que el presidente del comité de empresa sea partícipe de las decisiones que se toman en el seno del consorcio. El primero en alzar la voy fue el PP, que dijo que este nombramiento podría suponer un conflicto de intereses al ser el representante de los trabajadores el mismo que represente al Ayuntamiento. Tampoco el equipo de gobierno está de acuerdo. El concejal Alfredo Vega considera que puede haber una “colisión de intereses”. El Ejecutivo, explica, consultó con el anterior gerente del CST (ya que su nombre sonó a principios de mandato a propuesta de ERC-MES), quien les trasladó que sería una designación “complicada” que podría provocar que Lleonart tuviese, incluso, que ausentarse de algunas votaciones “por ser incompatible” su presencia en el consejo de gobierno (cuya mayoría ostenta la Generalitat) con la representación de los trabajadores. Vega niega que el Departament de Salut haya presionado al gobierno local, pero admite que han seguido el criterio de la gerencia.
Desde ERC-MES la valoración es radicalmente contraria. Para su portavoz, Isaac Albert, la incorporación de Lleonart supone un “cambio de paradigma en la forma de gestionar los órganos de gobierno” de empresas y consorcios públicos. “Por primera vez, los trabajadores tendrán voz y voto en el consejo de gobierno del CST, algo que no había sucedido ni aquí ni en ningún otro consorcio del país”, subraya el edil. Albert considera que “es una sacudida importante” en la forma de trabajar de la Administración y, aunque admite que la vía de la designación como representante del Ayuntamiento no es la más ortodoxa, considera que supone “abrir una puerta a una nueva manera de relacionarnos y conseguir que los trabajadores, como sucede en Alemania, por ejemplo, formen parte de los consejos de administración de las empresas públicas”. Es una forma, añade, de “corresponsabilizar a los trabajadores en el día a día del CST”.
Xavier Matilla, de TEC, considera “poco elegante” la abstención del bipartito porque “arroja dudas sobre la persona designada”. Matilla defiende el nombramiento de Lleonart en representación del Ayuntamiento, precisamente, porque “conoce muy bien la organización”.
