El aula magna del Centre Cultural de Terrassa acogió el miércoles una charla debate entre el presidente de la Assamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sánchez, y el periodista terrassense Salvador Cot.
Durante el acto, organizado por Terrassa per la Independència, la territorial egarense de la ANC, Sánchez habló de su reelección al frente la entidad. Preguntado por Cot, afirmó que "es evidente" que ha habido interferencias de los partidos. "La ANC es una de la entidades que ha tenido más peso últimamente. Hemos afectado la agenda política del país y, por tanto, la de los partidos. Es normal que una entidad que influye en los partidos acabe recibiendo la presión de estos", clarificó. Aun así, lamentó algunos tweets y mensajes de "determinados diputados incitando a determinados votos" y explicó que la difusión de las tensiones internas a través de los medios de comunicación "ha causado la sensación de que los problemas han sido mucho más graves de lo eran realmente".
Por otro lado, Sánchez explicó que "la Assamblea tiene muy claro que no podemos tomar nosotros solos las decisiones. Debemos coordinarnos con la sociedad civil y los partidos para decidir como queremos culminar este proceso". "Lo tenemos todo. Lo que nos hace falta es decidir cuando queremos romper con el Estado. O acabamos con ‘el procés’ o ‘el procés’ acabará con nosotros", afirmó.
11 de septiembre
El presidente de la ANC también se refirió a la imagen de falta de unidad entre las fuerzas independentistas y al cansancio de la gente. "Hemos hecho demasiado pocas fotos de unidad y demasiadas de desencuentro y esto debemos arreglarlo porque si no se nos girará en contra", mencionó. "Muchos dicen que ya no estarán allí pero no conozco a nadie que estaba convencido y que haya dejado de ser independentista", aseguró Sànchez, aunque admitió que "nos costará mucho volver a sacar un millón de personas a la calle el 11S".
En este sentido, explicó que la movilización prevista para la Diada de este año se ha pensado para dar oportunidad a la proximidad a través de Tarragona, Lleida, Berga y Salt, "donde queremos llevar a cabo las movilizaciones más grandes que estas localidades hayan vivido nunca". Además, "en Barcelona volveremos a salir a la calle con un gran acto. Estaremos allí como
el año pasado y cada año hasta que lo consigamos porque es la única fuerza que tenemos", señaló, a lo que prosiguió destacando que "no tenemos ningún derecho a decir que estamos cansados del 11 de septiembre porque cada año nos lo hemos pasado muy bien y porque los beneficios que obtenemos son mucho más grandes de los costes que nos comporta".
Sánchez también comentó que confía en que el 11S la cuestión de confianza de Puigdemont esté encaminada para salir adelante. Si no es así, "la movilización servirá para recordar a los 72 diputados que no les concedimos ningún margen de duda", destacó.
Referéndum vinculante
El Secretariat Nacional de la ANC acordó en junio someter a consideración de los socios de la entidad la posibilidad de que la Assamblea pida a las instituciones la celebración de un referéndum vinculante para decidir sobre la independencia. Preguntado por las similitudes de este hipotético referéndum con la consulta del 9N, Sánchez precisó que "el referéndum no lo hemos hecho nunca. Es más, nunca ha estado en el centro del debate político" exceptuando los inicios del ‘procés’. "Sabíamos perfectamente que el 9N no era vinculante no porque el Estado lo prohibiese sino porque no estaba presente en el Govern ni en Junqueras ni en la CUP la idea de hacer un referéndum vinculante", sostuvo Sánchez.
En este sentido, dijo que "todas las encuestas ponen en evidencia que hay más independentistas que votos a partidos explícitamente independentistas porque el voto es muy complejo". "¿Nadie cree que de los 100 mil votos de Unió no hay ninguno de independentista? ¿Y de los de Catalunya Sí que es Pot? ¿Y de los del PSC?", se preguntó Sànchez, a lo que señaló que este es el motivo por el que el secretariado propone un referéndum.