"Nunca antes tantos vecinos habían acudido a la cena de nuestras fiestas", comenta Karina Crespo, miembro de la A VV de Guadalhorce. Hasta 170 personas asistieron el pasado sábado por la noche al mencionado festín, que a nivel gastronómico consistió en una fideuá y una ensalada césar. La pista de baloncesto del barrio fue el escenario de la exitosa propuesta culinaria.
Si la mencionada cena fue por la noche, ya en la mañana del sábado se organizó una concurrida gincana familiar en que tomaron parte unos setenta vecinos, entre niños y sus padres. Después hubo una "guerra de agua" que, dadas las altas temperaturas, sentó muy bien a quien se involucró en tan refrescante batalla. Más tarde, el sábado por la tarde, en la misma pista, se repartieron unos doscientos vasos de chocolate a la taza.
Un sabor diferente tuvo el concurso de tortillas del domingo por la tarde. "Se premió el sabor, la presentación y la originalidad", explica Karina. En las fiestas, no hubo tanta participación el sábado como el domingo. Ese día, el acto más seguido fue la sesión de dj Blas.