El "Jazz a la fresca" ha arrancado con fuerza, con un fin de semana consagrado a dos maneras de ver el blues: la primera, con la presentación del nuevo disco de Lluís Coloma (concierto al que acudieron unas 80 personas), y el segundo, un concierto benéfico que protagonizó Steve de Swardt Blues Band.
La asociación Alba escogió a este músico natural de Zimbabwe pero afincado en Barcelona desde los años setenta, como líder de esta última formación que protagonizó su propuesta en el patio exterior de la Cava. Las altas temperaturas de la jornada propiciaron probablemente que muchos aficionados se acercaran a la sala no sólo para colaborar en un proyecto a beneficio del empoderamiento de la mujer en Burkina Faso, sino para volver a escuchar a un músico que hacía diez años que no pisaba la sala.
Steve de Swardt llegó muy bien arropado por tres músicos de gran nivel, el más conocido de ellos Arecio Smith, un teclista que ha demostrado en Terrassa en varias ocasiones su excelente nivel, especialmente en en el seno de bandas de groove y funk-jazz.
Música y opiniones
Pero quizá el más implicado al proyecto de sus compañeros de escenario fuera Diego Zapata. un músico de origen peruano del que pudimos descubrir su gran valía como guitarrista y su aceptable trazo como cantante. De hecho, se puede hablar de una banda con dos cabezas pensantes, ya que Diego Zapata le roba protagonismo en algunos temas al líder de la formación. Con todo, la veteranía y "labia" de Steve de Swardt (un músico que tiene ya 65 años, aunque no lo aparente) se impuso a lo largo de un concierto en el que sonaron muchos temas propios, escritos en inglés.
Steve de Swardt no es sólo un músico experimentado, sino también un personaje singular. Así lo pudieron constatar los aficionados que acudieron a su concierto con sus comentarios acerca del amor, sus opiniones acerca de la figura de Gaddafi o de cómo "los chinos dominarán el mundo gracias al jengibre…". Swardt mastica jengibre cuando se siente bajo de forma, y por lo visto le funciona y es contagioso: toda su banda, músicos jóvenes de los que le gusta rodearse, pusieron toda la carne en el asador ya fuera en los temas de blues-rock más trepidante como en las piezas en las que incursionaron en el groove más intenso.
De Swardt también habló de la inspiración, de cómo le llegan las historias de sus piezas, tanto de las pequeñas cosas (como cuando tu casero te pide que no hagas ruido en casa) como de los ideales; en "Freedom", ofrece su reflexión sobre aquella libertad que creemos que tenemos, cuando no es cierto. De algún modo, sus abundantes parlamentos entre tema y tema sirvieron también para hacernos una idea de la personalidad, no tan sólo de la musical, de un de Swardt completamente deshinibido y satisfecho con su proyecto actual.
Algo menos sabemos de su aliado en su proyecto actual, Diego Zapata, con el que colabora desde hace varios años y con el que ha logrado una sintonía evidente. Indagando, hemos sabido que este guitarrista y cantante se ha formado con Laly Rodriguez y Joan Pau Chaves, y que en la actualidad también trabaja como profesor de guitarra de rock, blues y funky.
En cualquier caso, haberle podido escuchar ha sido todo un descubrimiento, pudiendo augurarse un futuro especialmente prometedor dada su juventud. Y es probable que éste haya sido el primero de una serie de conciertos en el que podamos comprobar, a la larga, su evolución.
