España, el país con más densidad mundial de bares, cuenta con 260.000 establecimientos, uno por cada 175 personas, según los datos de la consultora Nielsen, que prevé que el número de aperturas crezca el 1,5 % durante 2016, tras un alza en 2015 del 3,6 por ciento.
El director general de Nielsen Iberia, Gustavo Núñez, ha destacado en rueda de prensa que se está retomando la tendencia de apertura de bares de antes de la crisis, uno de los mejores indicadores que muestran la evolución de la economía.
Núñez ha indicado que muchos españoles han encontrado una nueva salida profesional en la hostelería, como empresarios, autónomos o poniendo en marcha su franquicia de restauración organizada.
El sector diversifica la oferta -el bar tradicional “está en declive”; la franquicia ha traído más innovación y nuevas formas de trabajar y hay segmentación en los locales para atraer a los consumidores a lo largo de todo el día, aprovechando diferentes momentos de consumo, ha resumido.
Por su parte, el responsable del sector Horeca de Nielsen, Agustín Sans, ha remarcado que durante los siete años de crisis económica -desde 2008- se destruyeron entre 25.000 y 30.000 puntos de venta y el 30 % del valor en la venta de bebidas en la hostelería, con los locales nocturnos como principales damnificados.
En 2015 el consumo fuera del hogar empezó a recuperar clientes -según ha remarcado Sans- y también el gasto, en lo que ayuda el mayor clima de confianza -superior a países como Italia o Francia, por ejemplo-, las cifras récord de turistas y los indicadores macroeconómicos -bajo IPC, rebaja de las hipotecas y más empleo-.
Sans ha detallado que, de los 260.000 establecimientos con los que cuenta España en la actualidad, un 60 % bares tradicionales de más de 15 años de antigüedad media (244.088).
Aprecia una tendencia creciente a la apertura de locales de restauración organizada, que son ya más de 7.500, mientras que casi 8.200 establecimientos son “estacionales de costa”.
“Después de siete años, se abren bares por primera vez”, con una densidad por habitante que está por encima de países como Reino Unido, Francia o Italia, ha detallado el responsable del sector Horeca de Nielsen.
Ha valorado que la hostelería es vital para la economía española -casi la mitad de la población activa española como fuera del hogar- y, además, el 8 % de la población activa trabaja en el sector.
Además, y gracias al crecimiento que esperan en el número de locales para 2016, confían en que el alza en el volumen de ventas se sitúen por encima del 5 %.
Del informe de Nielsen se desprende que, tanto los bares como los consumidores, están experimentado importantes cambios.
“La cervecita vuelve” y supone más del 56 % del crecimiento de la hostelería diurna, en volumen, durante el último año móvil -hasta abril de 2016- y “la barra cambia” para adaptarse a un perfil de cliente que valora más la salud, la moda y el disfrute y productos como ginebras, tónicas e incluso bebidas alcohólicas premium.
El consumo de cerveza y alcohol de alta graduación durante el día crecen el 7,8 % y el 7,2 % en el último año móvil.
El consumidor busca locales temáticos, sofisticados, organizados, de bajo coste y nuevos conceptos de restauración, pero siempre con la tecnología como aliada y, de hecho, “el e-bar ya está aquí”.
El ocio nocturno pierde peso y gana el consumo durante los fines de semana -al mediodía- y las tardes del viernes.
Los españoles gastan 67 euros al mes en sus salidas nocturnas, cuando en 2009 rozaban los 100 euros.