El ministro de Justicia en funciones, Rafael Catalá, se ha mostrado hoy convencido de que, si tras las elecciones del 26J suenan en la sede del PP los teléfonos con llamadas del PSOE y de Ciudadanos, su partido dará prioridad a los socialistas.
Catalá ha hecho estas manifestaciones en un desayuno informativo organizado por Estrella Digital en el que ha explicado que, en esa disyuntiva, se descolgaría antes “el teléfono rojo” del PSOE que el “naranja” de Ciudadanos, dado que la suma del primero al “azul” del PP serviría para sumar una mayoría.
El naranja, de todos modos, también sería “muy útil” y podría dar “fortaleza”, ha matizado.
El responsable de Justicia ha considerado que va siendo hora de que España afronte otra transición que permita sentar en la mesa del Consejo de Ministros a personas de varios partidos.
Ha vaticinado que los resultados del 26J abocarán al diálogo y al consenso entre PP, PSOE y Ciudadanos y a la responsabilidad de estos partidos para garantizar la gobernabilidad.
Porque, a su juicio, lo que sería “demoledor” para los ciudadanos es que se tuviera que llegar a unas terceras elecciones. Sería “inimaginable”, ha sentenciado.
Según sus cálculos, el domingo no se producirá un cambio sustancial en los resultados respecto al 20D y, en ese contexto, ha confiado en el apoyo al PP de votantes de Ciudadanos que no quieren que sea investido el socialista Pedro Sánchez como presidente del Gobierno y en que los que se quedaron en casa en diciembre se movilicen y voten al centro-derecha moderado.
Pero ha arremetido contra Ciudadanos y ha calificado de “absurdo” y “antidemocrático” que el líder de este partido, Albert Rivera, condicione su apoyo al PP a la presencia de su líder, Mariano Rajoy.
“No tiene sentido que un partido le diga a otro qué personas tienen que estar”, ha zanjado Catalá después de señalar que bastante tiene Ciudadanos “con encontrar su estructura”.
Además, ha reiterado que no puede creer que un 25 por ciento de los votantes desee un Gobierno “marxista y comunista” de Podemos, que ha estado “envuelto” en una “piel de cordero” de la que se despoja con declaraciones que cuestionan la independencia judicial y policial.
Catalá ha sido preguntado por las declaraciones recientes del cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero, quien insinuó que un Gobierno de Podemos daría órdenes a los jueces y la Policía para detener a los corruptos.
Unas manifestaciones que, a juicio de Catalá, han mostrado cómo es realmente Podemos despojado de esa “piel de cordero” en el que ha estado envuelto, por lo que ha pedido a los ciudadanos que revisen los vídeos del programa de La Tuerka, en el que participaban líderes de ese partido, para que comprueben el modelo de sociedad que quiere esta formación.
Con las declaraciones de Monedero, Podemos “se califica a sí mismo”, ha dicho Catalá antes de confesar que no puede creerse que un 25 por ciento de los votantes optara por un Gobierno “marxista y comunista” que quiere un “control” de las instituciones.
Durante el turno de preguntas, Catalá ha negado cualquier estrategia del PP o su entorno para favorecer a Podemos y ha dicho que el desarrollo del partido de Pablo Iglesias más tiene que ver con un proceso social de crisis económica y de valores que han favorecido movimientos populistas en Europa y en Latinoamérica.