No hay nada positivo en este primer año de mandato municipal en lo que a la gestión del bipartito (PSC y CiU) se refiere. El PP hace una valoración demoledora de la acción municipal, especialmente del papel de los socialistas, que considera que ha venido marcado por el “postureo” y la “ineficacia” en la gestión. Los dos portavoces que ha tenido el grupo municipal desde que arrancó la legislatura, Gabriel Turmo (que dejó el Ayuntamiento en enero por problemas de salud) y Álex Rodríguez, han criticado con dureza restos doce meses de mandato. Para Turmo, ha sido un “año perdido” que se ha caracterizado por la “sumisión”, especialmente del alcalde, Jordi Ballart, al “independentismo radical de CiU”, a la “extrema izquierda de Terrassa en Comú” y a “los antisistema de la CUP”. Para Álex Rodríguez, el “principal problema” de la ciudad es el PSC, que “lleva 37 años gobernando y ha desconectado de la realidad”.