Jaume Martínez Vendrell, en la categoría preguerra, y Manuel Malo Vizcarra, en categoría postguerra, fueron los ganadores de la 39 edición del Ral.li de Motos Històriques de Terrassa, prueba organizada por la Escuderia Motor ATHC.
Los pilotos participantes afrontaron un recorrido de casi 100 kilómetros, 34 de los cuales eran cronometrados entre Matadepera y Navarcles, en la prueba de regularidad con más historia y prestigio del calendario nacional. Los ganadores tenían que cubrir la distancia establecida a una velocidad media de 39 kilómetros por hora. El Coll d’Estenalles constituía el obstáculo más duro que tenían que superar las motocicletas, un puerto que se subió en dos ocasiones, tanto en la ida como en la vuelta.
Ortiz se llevó la victoria a la regularidad en la categoría preguerra con una Ravat ER 120 del año 1930, mientras que Malo se proclamó ganador en postguerra conduciendo una Vespa del año 1964.
Premios
En relación al resto de premios que se otorgaron con motivo de esta cita deportiva, el correspondiente a la moto más antigua fue para la Indian Scout de 1925 de Josep Maria Piera Eroles. La mejor restauración preguerra fue para la Kündapp KS 600 del año 1937 de José López Miguel, mientras que la mejor restauración de clásicas premió a la Norton Fastback de 1970 de Jesús Moreno Bravo. La ganadora en la categoría femenina fue Goretti San José Call, con una Montesa Impala de 1963 y el premio al mejor sidecar correspondió a la BMW R/75 de 1943 de Francesc Roura Fernández.
Los pilotos partieron de las instalaciones del Atlètic en Can Salas para atravesar Matadepera en dirección a Navarcles, pasando por Coll d’Estenalles. En Navarcles se realizó el tradicional desayuno ofrecido por Amics del Motor de Navarcles. Después, los pilotos se desplazaron hacia Calders i Monistrol de Calders, desde donde partieron hacia el Coll de la Solana y dirigirse a Mura, pasando por segunda vez por el Coll d’Estenalles. Los participantes acabaron el recorrido en Matadepera, donde se expusieron las motocicletas.