El Govern ha acordado hoy garantizar que en Cataluña no se aplique el “fracking” -técnica de fractura hidráulica para la explotación de recursos naturales para el aprovechamiento de hidrocarburos-, pese a que el Tribunal Constitucional (TC) ha anulado la ley catalana que lo prohibía.
La consellera de la Presidencia, Neus Munté, ha explicado, tras la reunión de hoy del Govern, que esta anulación de la ley que prohíbe el uso del “fracking” en la búsqueda de hidrocarburos en Cataluña no implica que se siga utilizando esta técnica.
Aunque la ley haya sido anulada, el Govern dispone, ha dicho, de “herramientas administrativas y ambientales” para impedir el uso de esta técnica, ya que de la Generalitat “dependen” unos determinados trámites y autorizaciones ambientales para llevar a cabo actividades sometidas a una declaración de impacto ambiental.
Siempre que el Govern observe afectaciones negativas para el medio ambiente, puede aplicar una “salvaguarda” que impida desarrollar este tipo de actividades.
El Govern “reafirma” así su “compromiso” con el cumplimiento del mandato emanado del Parlament, que el 1 de octubre de 2014 aprobó las conclusiones del “informe de la comisión de estudio de los permisos de prospección y explotación de hidrocarburos no convencionales mediante la fractura hidráulica”.
El informe concluía que es “poco recomendable” que se impulse la técnica de la fractura hidráulica, ante los “costes sociales locales que podrían producirse”.