El mNACTEC acaba de incorporar a sus colecciones un conjunto de armas de fabricación catalana de los siglos XVIII y XIX. En concreto, y tal como adelantan fuentes del museo, "el conjunto está formado por cuatro armas de fuego portátiles de antecámara: una pistola de caballería, una pistola con cerradura de miquelete y dos pistolas de pequeñas dimensiones."
La adquisición, se explica además, "se enmarca en la línea de ampliación del fondo de armas del mNACTEC, que quiere dar relevancia a los productos técnicos de alta calidad derivados de la fragua catalana." Las armas se integrarán en la una nueva exposición, que se prepara de cara al próximo año, que estará centrada en la evolución histórica y tecnológica de la industria armamentística catalana.
Cada uno de estos objetos tiene, además, su propia historia. La pistola de caballería fue realizada entre los años 1760 y 1790; la pistola con cerradura de miguelete está datada en el año 1800, y en ambos casos las pistolas son originarias del Ripollès. Asimismo, las dos pistolas de pequeñas dimensiones se fabricaron sobre los años 1720 y 1780, y proceden de Olot y el Ripollès respectivamente.
Todas las pistolas tienen la característica cerradura de pedernal, con la excepción de la pequeña pistola ripollesa, "en la cual la cerradura original de pedernal fue posteriormente modificada para que funcionara por percusión (cerradura de de percusión) presumiblemente a mediados del siglo XIX", se explica.
Estas armas muestran la característica pericia técnica de los armeros catalanes, con trabajos destacados en hierro, latón, plata y madera de nogal. Las piezas ejemplifican "el grado de refinamiento" y "la calidad mecánica".