Unas cien personas se concentraron ayer en la calle de Joan XXIII, en Les Arenes, para protestar contra la instalación de una antena de telefonía móvil en la iglesia del barrio, en la parroquia de Santa Maria de Les Arenes.
El rector de la parroquia, Antoni Deulofeu, había acordado con una compañía telefónica la colocación de la antena en la terraza del templo. Aceptó por razones económicas para el mantenimiento de la parroquia y pidió un debate "riguroso y sin crispación" sobre unas obras que, aseguraba, contaban con los permisos preceptivos.
Las emisiones de la antena, según indicó el párroco, no son nocivas. Las obras se iniciaron hace días, aunque el acuerdo fue ratificado hace un par de años.
La estructura base ya se percibía el viernes pasado en la azotea de la iglesia de Les Arenes. Como se percibía también la polémica. La asociación de vecinos supo del asunto la semana pasada y pidió información al cura y al Ayuntamiento. La entidad vecinal quería disponer "de todos los datos" antes de tomar una decisión.
Durante el fin de semana varios vecinos hablaron entre ellos, y se movilizaron. Y convocaron una concentración, que tuvo lugar ayer ante el local de la asociación de vecinos. Las obras fueron paralizadas ayer, al menos de forma provisional, y el vecindario más combativo contra el proyecto llevará a cabo una recogida de firmas para evitar que prosiga la instalación.