Nuevo capítulo sobre el recurso de la Fundació Pere Tarrès y la empresa de catering Arkasa contra la adjudicación a Serhs del servicio de comedores escolares públicos. Arkasa, como se recordará, presentó esta alegación al Ayuntamiento pero este le comunicó que lo debía tramitar ante el Tribunal Català de Contractes del Sector Públic. Así lo hizo pero este tribunal resolvió meses después que no era de su competencia sino de quien había convocado el concurso, o sea el Ayuntamiento de Terrassa.
La empresa de catering ya consideró que había empezado por la vía adecuada pero ha proseguido el camino que le iban marcando unos y otros sin prisas ni pausas. Arkasa considera que su recurso debe merecer una respuesta por lo que, tras lo dicho por el tribunal, ha revisado el contenido y lo ha presentado de nuevo al Ayuntamiento, según confirmó ayer la concejal de Educación, Rosa Maria Ribera.
La alegación de Arkasa, que cuestiona que la propuesta de Serhs sea sostenible económicamente (en referencia al compromiso de las 500 becas por curso), ha entrado en el área de servicios jurídicos para que estos emitan un informe que deberá elevarse al pleno, previsiblemente en mayo, dijo Ribera, y que necesitará de la aprobación de la mayoría para salir adelante. Este informe, tal como explicó en su día Ribera, defenderá la adjudicación del Ayuntamiento realizada a Serhs y que ya se ha materializado en un contrato para que esta empresa empiece a operar en septiembre.
Incógnita en el pleno
Habrá que ver qué pasa en la sesión plenaria y si el recurso modificará o no la decisión que ha tomado la administración municipal de firmar el contrato aún sabiendo que la respuesta a Arkasa seguía en el aire. Porque cuando se realizó la adjudicación ya se alzaron voces discrepantes, especialmente de los grupos de la oposición más a la izquierda como ERC, TeC y la CUP, los cuales también coincidían con Arkasa en el fondo de la cuestión. Es decir, que estos grupos dudaban de la oferta de Serhs y acusaron al Ayuntamiento de priorizar la donación de las 500 becas por encima de otros aspectos relacionados con la calidad del servicio. En el otro extremo, PP y Ciutadans dieron un voto de confianza por lo que se espera que lo mantengan. El nuevo trámite que se ha iniciado no sólo afecta al Ayuntamiento, a quien le ha resucitado el recurso de Arkasa y debe dar respuesta plenaria, sino también a las otras empresas que se presentaron a la licitación. Ribera indicó que, reabierto el caso, las otras empresas que concurrieron también pueden presentar alegaciones, si lo consideran, en un plazo de diez días.