Un individuo tuvo que ser trasladado a Mútua el sábado, de madrugada, porque le sobrevino un ataque de ansiedad tras ser detenido por un robo en un coche. La Policía Municipal lo había arrestado, junto con otro sujeto, en la calle de Galileu, durante su huida.
Eran las 2.30 de la madrugada cuando la policía supo, por una llamada de un servicio de seguridad, que dos tipos habían roto una ventanilla en un coche estacionado en el aparcamiento subterráneo de la plaza del Progrés. Un vigilante les llamó la atención, y ellos echaron a correr. Según testigos, parecían en estado de ebriedad.
Corrieron como pudieron calle de Galileu arriba, pero unidades de la policía se pusieron en camino y unos agentes los pillaron en esa vía. Y los detuvieron, como presuntos autores de un delito de robo con fuerza en grado de tentativa, cuando se confirmaron los desperfectos en el vehículo, que tenía destrozada la ventanilla del copiloto. Los guardias elaboraron un acta de daños y citaron al vigilante para tomarle declaración.
Traslado
Dos dotaciones policiales trasladaron a los arrestados al hospital Mútua en cumplimiento de su derecho a ser asistidos, y luego los condujeron a la Jefatura. Pero uno de los detenidos volvió al mismo hospital poco después.
A las cinco de la madrugada, el cuerpo local activó el 061 para que una ambulancia se personase en las dependencias policiales de la avenida de Les Glòries Catalanes, pues uno de los arrestados sufría un ataque de ansiedad. Una ambulancia lo llevó a Mútua.