Josep Maria Álvarez, secretario general de la UGT en Catalunya, recientemente elegido como máximo responsable del sindicato en España, se ha despedido este mediodía de este cargo, que ha desempeñado durante veintiséis años, en el marco del XV Congreso Nacional de esta organización en Catalunya que se celebra hasta este viernes en el Centre Cultural de Terrassa. Álvarez ha pedido a los futuros dirigentes de la organización que mantengan su papel de “puente” entre España y Catalunya y ha asegurado que los sindicatos son la “mejor garantía de cohesión e igualdad” para defender los derechos de los trabajadores. Durante su intervención, que ha durado prácticamente una hora y media, se ha referido, entre otros asuntos, a los “papeles de Panamá”. Al respecto, se ha preguntado que “¿Cómo es posible que estados, partidos políticos y entidades económicas tengan la cara de pedir toda una serie de sacrificios de austeridad, mientras se está llevando a cabo un expolio fiscal que resta recursos necesarios para que funcionen los países”. Mañana se elegirá al sustituto de Álvarez., que con toda probabilidad será Camil Ros, secretario de organización de la UGT Catalunya.