El equipo de gobierno municipal tiene sobre la mesa una operación de refuerzo para que la flota de autobuses afronte la llegada de las altas temperaturas en mejores condiciones que el pasado año. Los siete vehículos nuevos que está previsto comprar en breve no llegarán a la ciudad hasta finales de año o principios de 2017, de manera que el parque móvil encara el calor igual o peor que el pasado verano, marcado por un alto índice de incidencias, averías y quejas ciudadanas.
Para evitar que el problema se repita, el ejecutivo de Jordi Ballart estudia la adquisición (compra o alquiler) de un paquete de vehículos que reforzarían la flota actual. Se trata de varias unidades que ya han circulado en tramos interurbanos, que acumulan menos kilometraje que un bus de linea y presentan un buen estado de mantenimiento. Así lo habrían corroborado los mecánicos de Tmesa en una inspección del lote.
La operación pretende reforzar la flota municipal de autobuses, retirar de la circulación los vehículos más deteriorados y dar juego a las reservas. La intención es que la adquisición se pueda cerrar cuanto antes, de manera que los autobuses puedan circular por la ciudad en pocas semanas.
La reclamación de la FAVT
La medida coincide con la insistente petición de refuerzos para la flota del bus por parte de distintas entidades ciudadanas. La última, la Federació d’Associacions de Veïns de Terrassa, que el mes pasado reclamaba acelerar la compra de nuevos vehículos y apostaba por adquirir el máximo número de autobuses híbridos. “Sería una temeridad no renovar la flota de autobuses antes del verano”, advertía el presidente de la entidad supravecinal, Ramon Clariana.
Los autobuses de refuerzo por los que se ha interesado el Ayuntamiento de Terrassa son vehículos de 12 metros de longitud, como los que habitualmente operan en las líneas egarenses, y de tecnología diesel. Todas las unidades estarían en condiciones de circular de inmediato y, pese a ser vehículos de segunda mano, tendrían por delante varios ejercicios de rodaje en buenas condiciones en la ciudad.
Negociación técnica y política
La concejalía de Movilidad negocia la operación con los propietarios del lote de autobuses y espera poder llevarla a pleno cuanto antes. Para ello, necesitará la complicidad de cinco concejales de la oposición para sumar mayoría, aunque la medida podría salir adelante con algunas abstenciones.
Tmesa cuenta en este momento con una flota de 63 vehículos, después de que el pasado verano ardiera un autobús en La Maurina y, pocas semanas más tarde, otro resultara dañado por el fuego, aunque en este caso con posibilidades de reparación.
El parque móvil de la empresa mixta tiene una media de edad que roza los 12 años, la vida útil estimada para los vehículos de línea sometidos a una explotación intensiva, como en Terrassa. Más de veinte vehículos superan ya los 14 años de trayectoria.
El Ayuntamiento de Terrassa tenía programada una renovación de cinco vehículos al año, un planing que se vio alterado el último ejercicio por el cambio de mandato y que se pretende compensar este año con la compra de quince nuevos vehículos que llegarán entre 2016 y 2017.