La vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, asegura que el Gobierno valenciano se va a “empeñar” en que los responsables del saqueo de las arcas públicas de la Comunitat Valenciana devuelvan el dinero, pues, según advierte, los ciudadanos “no se conforman con que vayan a la cárcel”.
En una entrevista con EFE, Oltra teme que todavía queden más casos de corrupción por aflorar en la Comunitat Valenciana, y otros que “nunca sabremos” pues el saqueo y la corrupción, dice, “fueron sistemáticos y sistémicos” y formaban parte de “la manera de perpetuarse en el poder del PP”.
Frente a eso, señala que la estrategia del nuevo Consell es “auditar las cuentas” públicas y “recuperar el dinero saqueado”, ya que los ciudadanos “no se conforman con que vayan a la cárcel los responsables, sino que quiere que devuelvan el dinero y en eso también nos vamos a empeñar”.
“Con esto podríamos poner un poco de orden en las cuentas de la Generalitat”, asegura Oltra, quien acusa al PP de haber situado el nivel de corrupción “en el más alto nivel” y de no haber sabido “gobernar ni tampoco irse”.
Destaca que hay trece exconsellers o expresidentes de la Generalitat investigados (antes imputados), procesados, condenados o en prisión, algo que no ha pasado “en ninguna otra comunidad autónoma” e incluso se atreve a decir que tampoco se ha visto “en ninguna parte” en el mundo occidental civilizado.
Señala que los actos de reprobación individual de estas personas deben ir unidos a una sentencia, pero indica que existe “un reproche y rechazo social” hacia quienes han protagonizado estos lamentables hechos, independientemente de que sean o no condenados por ellos, porque “todo el mundo sabe lo que han hecho.”
La vicepresidenta del Consell reivindica también un cambio del modelo de financiación y está convencida de que llegará este año porque el actual “es injusto en general”, “ultrajante” y “una traición” para la Comunitat, que es la única autonomía pobre (con una renta per cápita 12 puntos por debajo de la media) que paga.
En este sentido, ve necesario solucionar el sistema de financiación, pero también regularizar la deuda de la Comunitat Valenciana causada por la infrafinanciación acumulada, que ronda ya los 16.000 millones de euros, y que “no es justa porque va en contra de la Constitución y de las leyes que la desarrollan”.
Oltra asegura de que el Gobierno valenciano no tiene plan b porque “no hay plan sin financiación”, y advierte de que si no se tienen los recursos suficientes “no se pueden garantizar los derechos” de los valencianos.
La falta de financiación, asegura, “nos hipoteca las políticas esenciales”, como son la educación, la sanidad, los servicios sociales o la vivienda, pero también el futuro porque no se pueden abordar las políticas que tienen que cambiar el modelo productivo y generar un modelo económico que cree empleo.
La coportavoz de Compormís ha avanzado a EFE que la comisión de seguimiento del acuerdo del botánico -integrada por el PSPV, Compromís y Podemos- se convocará una vez pasen las vacaciones de Semana Santa y Pascua con el fin de “actualizar y ampliar” el pacto porque muchos de los objetivos “se han cumplido o están en marcha y hay que ser más ambiciosos”.
Sobre la acogida de refugiados, uno de los temas que Oltra ha abanderado personalmente, insiste en que la Comunitat está preparada para acoger a 1.400 personas y denuncia que el primer responsable de que eso no se produzca es el gobierno de España.
“A nosotros quien nos está impidiendo la llegada de refugiados es el Gobierno de España”, afirma Oltra, quien cree que un cambio de gobierno mejoraría la situación porque los estados miembro de la Unión Europea “siguen teniendo la soberanía para este tipo de políticas, pero están escudándose unos en otros”.
Tras su viaje a las islas griegas de Leros y de Lesbos, cree que lo que a la Generalitat le queda por hacer es “presión política” y acusar a la Unión Europa de haberse “alejado completamente de sus valores y principios fundacionales” y del sentir de la mayoría de sus ciudadanos.
“Los estados miembro y las instituciones ejecutivas en la UE están provocando vergüenza y que los ciudadanos nos sintamos avergonzados de decir que somos europeos o de algún estado miembro”, afirma Oltra, para quién lo hay que hacer es “cambiar las políticas del Estado”.