El Ayuntamiento de Sant Cugat inicó el martes, coincidiendo con el Día Mundial del Agua, una campaña para concienciar a la ciudadanía de la necesidad de no lanzar toallitas húmedas al inodoro, ya que es un tipo de residuo que tarda mucho tiempo en descomponerse y provoca atascos importantes en el alcantarillado.
Por ello, la campaña está concebida para concienciar de la necesidad de reducir los impactos ambientales, económicos, técnicos y sociales que supone lanzar las toallitas al váter en vez de depositarlas en el contenedor de basura.
Gestión
La campaña municipal se desarrollará en varias fases. En la primera, se engancharán pegatinas a los lavabos de los 77 equipamientos municipales (escuelas, centros culturales, etc.) informando de que las toallitas se tienen que tirar a la basura. También en la factura de la agua, a partir de junio, se publicará un pie de página informando de la correcta gestión de las toallitas.
El uso de toallitas húmedas es cada vez más habitual. A diferencia del papel higiénico, que se deshace de una manera rápida, las toallitas -aunque en los envases se informa de que son biodegradables- se deshacen a un ritmo muy lento.