A Patricio Keenan se le resiste la posibilidad de levantar un título con el Egara. El equipo regresaba a una final tras cuatro años de ausencia y esperaba ganar un trofeo que se le resiste desde hace ya siete. El preparador argentino encajó con resignación otra derrota por la mínima ante el Polo. "Estoy contento porque hemos sabido competir. La diferencia ha estado en el gol que nos marcaron y que nosotros no supimos anotar. Excepto en el segundo cuarto, le jugamos al Polo de igual a igual. Sólo me queda felicitarles. Confiamos en ganarles dentro de quince días en la EHL", señaló Keenan durante la ceremonia de entrega de trofeos. En relación a las ocasiones falladas por Arbós y Quera comentó: "Al final, lo único que cuenta son los goles. Si no entran no sirve de nada lamentarse", razonó el técnico, que a pocas horas del partido conoció la baja del central Ramon Romeu, que cayó víctima de la gripe estomacal que viene afectando a la plantilla desde la semana pasada. Franc Dinarès ocupó su lugar. En relación al encuentro, Keenan señaló: "Pensaba que iban a atacarnos un poquito más. En algunos cuartos, el control del partido lo llevamos nosotros y ellos se dedicaron a esperar atrás y salir a la contra. Ninguno de los partidos que jugamos con el Polo fue igual", señaló. Al argentino no le preocupa especialmente haber perdido ya tres finales consecutivas con los barceloneses. "Jugamos contra un equipo semiprofesional tirando sólo de cantera. Estamos cerca, pero por ahora sólo nos queda pensar en la Liga. Esperemos que este año acabemos ganándola". Desde el otro banquillo, Carlos García Cuenca se felicitaba por haber sumado un título más a su ya extenso palmarés con el Polo. "Sabíamos que la Copa sería muy difícil, pero ha salido bien. Otra vez ha habido que trabajar hasta el último minuto. Somos justos ganadores. No hemos encajado ningún gol. Eso y la efectividad en el penalti ha sido clave", apuntó el preparador gallego.
