El personal del servicio de gestión del espacio público ha comenzado a emplear un nuevo sistema para conseguir que las raíces de los árboles no malmetan las aceras. La experiencia se aplica esta semana en el Portal de Sant Roc, en el Centre. Justo en un tipo de árbol, el almez, al que se le ha ampliado el alcorque. Es decir, el hoyo que se hace al pie de las plantas para lograr retener el agua cuando se riega.
Este alcorque se tapará con un tipo de hormigón poroso. Así se consigue que llegue más oxígeno y agua a las raíces, de modo que se evita que éstas crezcan tanto hacia la superficie en busca de dichos elementos, que es lo que al final puede hacer que se levanten las aceras. Esta misma técnica ya se utilizó cuando se plantaron nuevos árboles en la calle de Provenza, en el barrio de Sant Pere Nord. En aquella ocasión se obtuvieron unos buenos resultados. Sin embargo ahora la metodología se ha aplicado en árboles ya plantados y de grandes dimensiones. Si la técnica funciona, más adelante se empleará en el resto de árboles del lado norte de la calle. Los trabajos acabarán el viernes.