La oposición de izquierdas cerró ayer la posibilidad a un acuerdo con C,s y el equipo de gobierno en los términos en que se ha articulado el pacto del bus. “No queremos ser cómplices de esta mediocridad de pacto”, comentaba ayer Xavier Matilla, concejal de Terrassa en Comú. La confluencia presentará junto a ERC-MES y probablemente también la CUP, una enmienda al dictamen que defenderá el gobierno.
“La monitorización de los buses estaba prevista y la renovación de la flota de Eco Equip también, de manera que este es un pacto absurdo y sin contrapartidas”. Matilla recuerda que “la de C,s no era la única posibilidad de acuerdo. El gobierno no ha querido rectificar ni tener en cuenta la propuesta más mayoritaria. Además, pierde la posibilidad de recuperar una mayoría estable de cara al debate del Pla de Mobilitat”.
Carles Caballero, de ERC-MES, también cree que “la apuesta por la tecnología híbrida no es un experimento”. Los grupos tuvieron la oportunidad el jueves de debatir el tema con la cúpula del grupo Avanza, en la sede de Tmesa. “Desde el punto de vista económico -añade-, 40 mil euros anuales son más que asumibles. Este es un tema de voluntad política”.
