El excontable del Instituto Nóos, Marco Antonio Tejeiro, que también realizó trabajos de administración para Aizoon, ha asegurado hoy en el juicio que la infanta Cristina no ejerció ninguna función ni en la asociación de la que formaba parte ni en la empresa que compartía con su marido, Iñaki Urdangarin.
“No tenía ninguna función”, ha incidido el acusado al ser interrogado sobre la presencia formal de la infanta, que era socia al 50 % de Aizoon y pertenecía a la junta directiva del Instituto Nóos, la asociación sin ánimo de lucro con la que Urdangarin y su socio, Diego Torres, contrataron con administraciones públicas por valor de 6 millones de euros.
Tejeiro ha dicho que la hermana del Rey nunca le entregó una factura, ni le dio ninguna orden ni se comunicó con él sobre asuntos profesionales.
“La he visto dos veces”, ha afirmado el excontable antes de detallar que se la presentaron un día que pasó por la oficina para recoger a su esposo. Además asistió en la casa de los entonces duques de Palma invitado a una fiesta de cumpleaños de Urdangarin.
También ha señalado que el exsecretario de las infantas, Carlos García Revenga, quien igualmente formó parte de la junta del Instituto Nóos, tampoco intervenía en las actividades de la entidad.
Tejeiro ha subrayado que todas las decisiones del entramado empresarial que orbitaba en torno al Instituto Nóos las adoptaban Iñaki Urdangarin y su socio, Diego Torres, a quienes en los tres días que se prolonga ya su declaración ha señalado reiteradamente como autores de distintos delitos.
También ha vuelto a abordar hoy el fiscal Pedro Horrach la cuestión de si Urdangarin cumplió las órdenes de la Casa Real de apartarse de las actividades del Instituto Nóos una vez fueron cuestionadas públicamente en 2006 por sus contratos con el Govern balear.
Como ya dijo el pasado viernes, la salida del entonces yerno del Rey del Instituto Nóos fue una formalidad, porque al menos durante unos meses siguió ligado a Torres e “hizo gestiones” para el proyecto de organizar la candidatura de Valencia a acoger los Juegos Europeos.
“Sabía que no tenía que aparecer” Urdangarin en los proyectos de la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social, una entidad que a juicio de la Fiscalía fue la heredera del Instituto Nóos.
Horrach ha mostrado durante el interrogatorio a Tejeiro correos electrónicos de hasta 2008, dos años después de la supuesta ruptura, con el propósito de probar que Urdangarin y Torres mantenían entonces relaciones comerciales.