El conseller Antoni Comín anunció ayer a la comisión de Salut del Parlament que el 22 de febrero saldrían del Siscat –el Sistema Sanitari Integral d´Utilització Pública de Catalunya– la clínica del Vallès y el hospital General de Catalunya, dos centros sanitarios privados con ánimo de lucro que actualmente pertenecen al grupo Quirón. Es el primer cumplimiento de los pactos con la CUP de no contratar servicios sanitarios públicos con entidades privadas con ánimo de lucro (Una gran parte del sistema está basado en entidades privadas, pero sin ánimo de lucro).
Ambos centros tienen un contrato hasta agosto con el Servei Català de la Salut para atender intervenciones extraordinarias con el objetivo de reducir listas de espera, pero no estaban integrados en la organización de la asistencia ordinaria. La exclusión cumple lo prometido, pero no excluye que puedan ser contratados de nuevo sus servicios. La Clínica del Vallés, por ejemplo, se ocupó en 2014 de 2.573 intervenciones públicas, y el General de Catalunya, de 636. Presumiblemente, esa demanda la atenderá ahora el Parc Taulí y algún otro centro público.