Se siente privilegiado porque pudo estudiar lo que deseaba, Biología, y ejercer como investigador en este campo, en concreto en el área de la enfermedad del cáncer (cuestión que protagoniza el reportaje central en nuestra edición de hoy del suplemento Gent DT). Nourddine Louliki, de 48 años, es de Marruecos y vino a Catalunya para cursar el doctorado para acceder después a distintos puestos de investigador mediante programas de becas. Actualmente desarrolla su labor en los Laboratorios Pierre Fabre de Francia, la empresa donde empezó. Subraya que el camino ha sido duro y que nadie le ha regalado nada. Noureddine mantiene fuertes lazos afectivos con Terrassa (su mujer es de esta ciudad) y visitó la Escola Montserrat para explicar su experiencia personal y profesional.
Usted estudió Biología en Marruecos y vino a Catalunya en 1992 para realizar el doctorado en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB). ¿Cómo recuerda aquella primera etapa?
Fue muy dura porque no hablaba ni catalán ni castellano y tenía pocos recursos. Recuerdo que me instalé en Cerdanyola y que vivía con 140 euros al mes (23 mil pesetas de entonces). No me daba para pagar el crédito que pedí para costear los estudios ni tampoco para pagar el alquiler de la habitación ni los gastos de luz, agua, la comida y la ropa… Tuve que trabajar recogiendo fruta y otras cosas pero con dificultades porque no tenía permiso de trabajo. Mi permiso ponía “estudiante no autorizado a trabajar en España”.
¿Cómo surgió su primera oportunidad para costear los estudios y seguir adelante?
Mediante la obtención de becas. Primero estuve en el Hospital del Mar con una beca Ramon Areces para tabajar en el tema del cáncer y después me mudé al Hospital de Vall d’ Hebron donde conseguí acabar el doctorado. A continuación me surgió la posibilidad, a través de una beca Marie Curie, de trabajar en los Laboratorios Pierre Fabre de Francia. Precisamente hace cuatro años y medio que me reincorporé a esta empresa como investigador en cancerología, después de pasar ocho años en Suiza, primero en la Universidad de Lausanne y después en el hospital de esta misma ciudad.
¿Qué tipo de cáncer es el que afecta más a la sociedad actual y el que puede aflorar en un futuro inmediato?
En la sociedad actual la tipología y las causas del cáncer son diversas y pueden variar según el país y el género. El cáncer de estómago es frecuente entre hombres y mujeres; el cáncer de mama y de cuello uterino son más frecuentes entre mujeres; y el cáncer de pulmon y de prostata se da más en hombres.
El nivel de conocimiento científico sobre esta enfermedad ha avanzado mucho. ¿Qué líneas de estudio están abiertas ahora?
Es así. Cada día que pasa hay avances sobre esta enfermedad. Una de las líneas de estudio más relevantes es la immuno-oncología, que consiste en ayudar al sistema immunológico de los enfermos para que puedan combatir el cáncer. De un modo divulgativo sería lograr que la misma sangre del paciente pueda eliminar las células cancerígenas.También se investiga la terapia con anticuerpos monoclonales nudos o conjugados a diferentes moléculas tóxicas que matan la células cancerígenas y no las células sanas. Este método último disminuye los efectos secundarios provocados por la quimioterapia y da mejores resultados.
Para tratar esta enfermedad se habla de abordaje multidisciplinar y tratamiento personalizado a cada paciente. ¿Es el camino a seguir?
Sí. Ahora sabemos mucho sobre el cáncer aunque todavía hay mucho que investigar. Conocemos muchos marcadores para diferentes tipos de cáncer e incluso en el mismo tipo de cáncer los marcadores pueden variar entre individuos. Por eso el tratamiento individualizado para cada paciente es importante. Hay tratamientos que pueden dar resultado para un paciente y no para otro con el mismo tipo de enfermedad.
¿Por qué quiso estudiar Biología?
Estudie Biología pero no era mi única vocación. Me gustaba también la física, la química los matemáticas y podía haber escogido una o otra área de conocimiento.Quizás escogí Biología porque mi madre falleció de cáncer.
¿Qué balance hace de cómo le han ido las cosas hasta ahora?
Estoy satisfecho de cómo me ha ido hasta ahora, incluso pienso que las cosas me han ido mejor de lo que esperaba porque también he tenido suerte en mi camino. Pero puedo decir que me lo he merecido. Nadie me ha regalado nada.
Incluso ha tenido la oportunidad de compartir trabajo con un científico Premio Nobel
Sí compartí publicación con un Premio Nobel israelí, Aaron Ciechanover, que fue Nobel de Química en 2004 aunque no nos conocemos personalmente. Cuando nuestro trabajo se publicó aún no era Premio Nobel. El trabajo con Ciechanover estaba relacionado con el cáncer. En células de cáncer descubrimos unas proteínas que regulaban el ciclo celular y lo publicamos en 1998. Hoy día ya no es una novedad. Además del trabajo, que fue muy provechoso, quiero remarcar que fue un ejemplo positivo de colaboración en tanto que unió a un musulman y a un israelí.
¿Está satisfecho con su posición de investigador?
Sí, ahora sólo me dedico a este trabajo en la empresa privada y es más relajado. Por mi experiencia en universidades, el trabajo de profesor e investigador es cada vez más duro porque hay que buscar financiación para los proyectos, para los doctorados y dar clases. Esta combinación de tareas se hace difícil -incluso lo era ya en Suiza donde trabajé en la Universidad de Lausanne- y la investigación acaba por resentirse porque no deja mucho tiempo para dedicarse a la ciencia. El problema es que cada vez hay más competencia y menos dinero.
¿Le gustaría regresar a Catalunya?
Me gustaría regresar a Catalunya. Le debo mucho a Catalunya.Me ha dado un doctorado, dos idiomas (el catalán y el castellano), una mujer (terrassense) y muchos amigos. Pero le veo casi imposible con la crisis que sacude el país. Tengo muchos amigos investigadores en Catalunya y les cuesta mucho seguir adelante, algunos incluso se han ido a otros países.
A raíz de sus vínculos con Terrassa, aceptó la invitación de la Escola Montserrat para dar una charla con los alumnos de primaria. ¿Es bueno divulgar estas experiencias en primera persona para que personas de su país y también de otros tengan referentes?
Es muy importante divulgar estas experiencias a los jóvenes de mi país y también a los catalanes. El ejemplo es también para todo el mundo. No se pueden conseguir las cosas bajando los brazos. Hay que trabajar mucho, ser honesto y ser responsable. Los errores que cometemos por negligencia, por vagancia o por irresponsabilidad pueden resultar caros en el futuro y nos pasan factura.
Usted emigró de su país para labrarse un futuro mejor y ha podido cumplir su sueño. ¿Cree que la sociedad actual da la acogida que se merece a las personas más vulnerables?
Yo me considero privilegiado porque hay gente que no ha podido tener las oportunidades que yo he tenido. La sociedad actual es muy complicada y variada. Todo depende con quien te tropeces. A veces tienes suerte y te encuentras con personas humanas que te ayudan y te abren puertas, y a veces te encuentras con otras que te lo ponen muy difícil o imposible. Hay cosas muy sencillas que me han costado mucho de conseguir y otras muy difíciles que no me han costado nada. Por eso cuando una puerta está cerrada no hay que forzarla sino rodearla, dar la vuelta y entrar por otro lado o buscar otra puerta.
¿Habla con sentimiento de causa?
Sí, puedo citar algunos ejemplos. Después del doctorado en la Autònoma, lo intenté todo para conseguir el permiso de trabajo en España. Nunca lo conseguí. Para trabajar me pedían permiso de trabajo y para tener el permiso de trabajo me pedían un contrato de trabajo. En Franciay Suiza me dieron la residencia y el permiso de trabajo fácilmente. Ahora tengo la nacionalidad francesa.