El último informe de la Síndica Municipal de Greuges de Terrassa revela que la mayoría de las recomendaciones que la institución formuló en 2015 a la administración local, y que tienen como origen una queja ciudadana, acabaron el año no siendo aceptadas o pendientes de respuesta.
Durante el último ejercicio, la defensora del ciudadano recibió un total de 146 nuevas quejas, 65 de las cuales fueron admitidas a trámite. Las 81 restantes (un 55,5%), fueron presentadas en la oficina local pero por su contenido, vinculado a administraciones públicas distintas a la municipal, fueron remitidas a la Sindicatura de Greuges de Catalunya.
De las 65 quejas admitidas, 44 finalizaron su tramitación el mismo año pasado y 19 acabaron en una recomendación al Ayuntamiento de Terrassa. La mayoría de ellas, 15, siguen pendiente se respuesta (10) o no han sido aceptadas por la administración local (5), que el año pasado sólo admitió 3 recomendaciones de la síndica de forma global y 1 parcialmente.
La proporción es similar en las recomendaciones de 2014 que quedaron pendientes y se resolvieron el pasado ejercicio. A 31 de diciembre de 2015, de las cuatro quejas ciudadanas que la sindica envió al Ayuntamiento en forma de propuesta de cambio o mejora, 3 no fueron aceptadas y una sigue sin respuesta.
El volumen más importante de las sugerencias que la Síndica hace llegar a la administración sigue relacionado con multas de tráfico, 9 en total. 5 de ellas corresponden a reclamaciones ciudadanas por la intervención de la grúa.
Las quejas por temas de responsabilidad patrimonial, por discrepancias con la ubicación de contenedores, sanciones relacionadas con la tenencia de animales domésticos, tributos y malas praxis completan el listado, aunque éstas en menor proporción, apenas un expediente por caso.
Mas allá de las solicitudes a la administración local para que mejore procedimientos o corrija actitudes, la Síndica puso el año pasado el acento de su gestión en la mediación. El resultado fue que 15 de los 44 expedientes abiertos y finalizados el año pasado se resolvieron por la vía del acuerdo entre las partes, es decir, con un pacto entre el ciudadano y la administración.
Sindicatura de oficio
El año pasado la Sindicatura de Greuges de Terrassa llevo a cabo hasta ocho actuaciones de oficio, el doble que el ejercicio anterior. La institución respondía así a un volumen de quejas formuladas por personas y colectivos que, por su trascendencia social, requieren de un gesto por parte de las administraciones públicas.
La más relevante tiene que ver con el principio de veracidad de los agentes de la autoridad. Una iniciativa conjunta llevada a cabo por los síndicos de Sant Cugat, Sabadell y Terrassa, que en nuestra ciudad ha dado lugar a la elaboración, por parte del Ayuntamiento, de un código de buenas prácticas de aplicación a los funcionarios municipales.
La reflexión sobre el principio de veracidad, cuando entra en conflicto con la presunción de inocencia o resulta injustamente lesivo para el administrado, fue acreditada por un dictamen elaborado por profesores de derecho constitucional de la Facultad de Derecho de la UAB.
Las siete actuaciones de oficio restantes de la Síndica se han centrado en la reivindicación de los derechos del colectivo LGTB; la petición de plazas de estacionamiento para discapacitados en la calle del Castell, en el acceso a los distintos servicios de Mútua; la petición de una mayor flexibilidad con los vecinos de la Rambla d’Egara que acceden en coche por la zona limitada al tráfico; y la no aplicación de la plusvalía cuando el valor de los terrenos disminuye.
Cierran la lista dos iniciativas de carácter institucional con motivo del Día Mundial de la Salut Mental y el Día Universal de la Declaración de los Derechos de los Niños.
En total, la Síndica Municipal de Greuges de Terrassa realizó el año pasado más de mil actuaciones en la ciudad. La gran mayoría, cerca de seiscientas, fueron consultas y asesoramientos, y 56 de las preguntas llegaron a la institución a través de twitter, donde la Síndica cuenta en estos momentos con 3 mil seguidores.