La concejal de Seguridad, Maruja Rambla, reconoció ayer que “no se habló de cámaras en los uniformes de la Policía Municipal antes de que el alcalde Jordi Ballart lo anunciara”. Con estas declaraciones Rambla dio la razón al portavoz de ERC, Isaac Albert, quien el jueves criticó que “esta idea no aparecía en el documento del plan director”. La respuesta de la concejal tuvo, sin embargo, algún matiz aportado por el teniente de alcalde, Marc Armengol, quien, tras decir que estaba “sorprendido” por las declaraciones de ERC, agregó que “el tema de las cámaras es una reivindicación histórica de los agentes. Siempre ha estado sobre la mesa”.
La concejal de Seguridad significó que la dotación de cámaras en los uniformes es una de las medidas “estrella” del nuevo plan director de la Policía Municipal. Otra de ellas, añadió, es la implantación de una unidad de patrullaje en bicicleta en el Parc de Vallparadís. Acto seguido subrayó también que ambas medidas se llevarán a cabo pero como experiencia piloto. También destacó que el plan director “pretende aumentar los efectivos y los recursos para mejorar un servicio que debe cumplir con un modelo de policía municipal más educativa, asistencial y en defensa de los ciudadanos” y que por este motivo se ha considerado su presentación en los distritos.
Rambla y Armengol hicieron estas manifestaciones durante la presentación de una propuesta de resolución para el pleno del próximo jueves que quiere reconocer la tarea que desarrollan los agentes locales así como la voluntad de mejorar el servicio entendiendo que hay que preservar el derecho a la libertad de expresión y el de la seguridad. La moción surge en pleno conflicto de la querella de un grupo de quince policías contra la concejal de la CUP, Maria Sirvent.
